Nerpio entra en la lista de los 17 pueblos más bonitos de España

E.F. / i.M.
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La ronda final para votar en la competición de ámbito nacional se cerrará el día 25

Nerpio, el municipio de la Sierra del Segura donde se acaba la provincia de Albacete, encajado como una cuña entre las provincias de Granada, Jaén y Murcia, se ha colado en la ronda final del concurso para elegido el pueblo más bonito de España, organizado por el grupo Atresmedia.

El municipio serrano se impuso en la ronda autonómica, cuya votación por internet se cerró el pasado día 6, sábado, a otros 15 municipios de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, entre los que había otros tres competidores albaceteños: Alcalá del Júcar, Ayna y Riópar.

Los cuatro se colaron en la parte alta de la tabla y, en honor a la justicia, fue una competición reñida, porque los tres primeros puestos de esta ronda autonómica los coparon Nerpio (49.357 votos, primera posición), Alcalá del Júcar (37.057, segunda plaza) y Ayna (16.897, tercera posición). Riópar,  por su parte, se encaramó hasta el sexto puesto de la tabla regional, con 5.667 votos.

  A partir de ahora , los interesados podrán votar  hasta el próximo 25 de febrero, para decidir cuál de los 17 municipios finalistas es el más bonito de España. Nerpio, por tanto, deberá competir con los 16 pueblos más ‘bonicos’ de las 16 comunidades autónomas restantes.. Antes de que se supiese el resultado de la ronda autonómica, el alcalde de Neripo, José Antonio Gómez, decía que ésta es la primera vez que el municipio se ve metido en este tipo de votaciones.

El término serrano cerró el pasado año con 50.000 pernoctaciones registradas, acaba de estrenar nueva web turística y su apuesta por el turismo es constante al igual que el flujo de visitas que recibe procedentes en su mayoría de Valencia y Murcia. De Nerpio se dice que cuenta con un importante patrimonio y que es un lugar privilegiado por su naturaleza impresionante y bien conservada, por los restos de su historia milenaria que se remonta al mesolítico, y también por la supervivencia de formas de vida que en otros lugares desaparecieron hace tiempo.