La Diputación inicia el traslado de los muebles del Chalet Fontecha

M.D.M.
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La antigua sede de la Cámara se prepara para acoger el Museo de Arte Realista

Uno de los despachos del Chalet Fontecha, ya vacío. - Foto: ARTURO PÉREZ

La Diputación Provincial de Albacete da un paso más estos días para convertir el Chalet Fontecha, en pleno centro económico de la ciudad, en el futuro Museo de Arte Realista.

En concreto, durante estos días están realizando la mudanza de los muebles de este emblemático edificio. Muebles que, en función de su antigüedad, correrán distinta suerte. Así, desde la institución provincial detallaron que en un primer momento se están trasladando los que son de oficina, más ‘modernos’.

Estos muebles se instalarán en distintas dependencias de organismos de la Diputación, como las nuevas instalaciones del Instituto Técnico Agronómico (ITAP).

Además, algunos de estos muebles «que no tienen valor histórico» han sido vendidos a empresas que se encargan de comercializarlos, tal y como lo detallaron desde la citad entidad.

Distinta suerte correrán los muebles históricos que había en este céntrico edificio.

Los mismos, tras ser inventariados por los técnicos que llevan a cabo este proyecto de acondicionamiento del chalet para el futuro Museo de Arte Realista, serán colocados en dependencias de la propia Diputación Provincial, aunque queda por decidir exactamente en qué espacios.

Operación. Los muebles históricos de la antigua sede de la Cámara de Comercio forman parte de la compra del edificio.

Por ello, son ya propiedad de la Diputación Provincial, que es a quién corresponde organizar su traslado y darles una nueva ubicación a los mismos.

La mudanza comenzó hace unos días y en las instalaciones de este edificio todavía esperan algunos de los muebles o los archivadores con documentación para ser trasladados a su nueva ubicación.

La idea, como lo anunció la presidenta de la Junta de Comunidades, María Dolores Cospedal, al presentar esta iniciativa es que el Museo de Arte Realista de Albacete pueda ser una realidad el próximo año.

Con el edificio ya sin muebles, preparado para las obras de acondicionamiento que sean necesarias, este proyecto cultural estará un paso más cerca, aunque todavía quedan algunos meses por delante para ello.