Cuando empezó la crisis, en 2008, Castilla-La Mancha tenía 137.823 empresas registradas en el Dirce, el Directorio Central de Empresas. Cinco años después, la región ha cerrado 2012 con 127.632, es decir, 10.000 menos que al inicio de la recesión. ¿Pero todo baja? Según este registro, hay sectores concretos donde ha aumentado el número de empresas en plena crisis.

Es lo que ocurre, por ejemplo, con las empresas vinculadas a actividades deportivas. Han crecido en 132 y ya hay 615. También han aumentado las empresas de actividades de creación artística y espectáculos en 103 y han llegado en 2012 a la cota de 646. Dentro del terreno cultural, las empresas de edición de libros, periódicos y otras actividades editoriales han subido en 17 y ya son 156. Las vinculadas a actividades de bibliotecas, archivos o museos también han subido de 29 a 78, lo que supone un incremento del 168%. Parece que estos aumentos se han traducido también al comercio. Durante estos cinco años han crecido en 117 las empresas de comercio al por menor de artículos culturales y recreativos en establecimientos especializados. Ahora hay 1.287.

La informática también parece que ha tirado para arriba. La edición de programas informáticos prácticamente se ha duplicado pasando de 38 a 64.  Las empresas de programación, consultoría y otras actividades relacionadas con la informática también se han disparado, pasando de 278 a 356 (78 más). Más ha sido el aumento incluso entre las empresas de reparación de ordenadores y equipos de comunicación, que han crecido en 205. Antes de la crisis eran 143 y tras cinco años son 348. Y suben también las empresas de procesadores de datos y portales web (hay casi el doble, de 60 a 127).

En términos absolutos, ningún sector supera al aumento de empresas de producción, transporte y distribución de energía eléctrica. En cinco años hay casi 1.000 más (en concreto 966), pasando de 830 a 1.796.  Dentro de la parte de suministros, también han aumentado las empresas de captación, depuración y distribución de agua, que estaban en 52 y han llegado a las 100. Quizá porque sube la informática y la electricidad, se nota un giro de tendencia en las empresas de ingeniería civil. Antes de que empezase la crisis ganaban las de construcción de carreteras, vías férreas, puentes y túneles. De éstas había 58, pero han bajado a 48. Ahora las que ganan son las empresas de ingeniería civil de construcción de redes energéticas o de telecomunicaciones, porque había 12 al inicio de la crisis y ahora son 61.

Empresas de servicios sociales. Muchos de los sectores en los que crece el número de empresas están vinculados a los servicios sociales. Las de actividades sanitarias han crecido en 417, pasando de 2.909 empresas en 2008 a 3.326 en 2012. El número de negocios de fabricación de instrumentos y suministros médicos y odontológicos también ha crecido. Hay 32 más y ya son 150. Las empresas vinculadas a la educación han subido en 446 y suman ya 2.673. El principal aumento se da en lo que se califica como «otra educación», la que no está vinculada ni a Primaria, Secundaria o postsecundaria. Por último, las empresas de asistencia en establecimientos residenciales  han  crecido en 28, por lo que ya hay 283.

¿Qué más flechas tiran hacia arriba?Hay 242 empresas más de reparación de vehículos de motor, 64 más de transporte terrestre de pasajeros, 33 más de depósito y almacenamiento vinculado al transporte de mercancías, 32 más de actividades postales y de correos, 14 más de telecomunicaciones, 242 más de actividades auxiliares a servicios financieros, seguros y fondos de pensiones, 49 más de limpieza y 20 más de agencias de viaje y touroperadores.

También suben y mucho las empresas de alquiler de bienes inmobiliarios, pero las de que son por cuenta propia. Pasan de 1.264 a 1.987 (723 más). Prácticamente es lo único vinculado al sector inmobiliario que sube.

Dominó de ladrillo. Las empresas de construcción de edificios han caído como piezas de dominó. En 2008 había 15.791 y ahora quedan 10.048, es decir, que hay 5.743 menos. También han bajado en 511 las empresas de promoción inmobiliaria (quedan 2.936). En estos cinco años han bajado las empresas de acabados de edificios en  2.626, por lo que ahora sobreviven 3.724.  Y las de instalaciones eléctricas o de fontanería también han descendido en 547, por lo que se salvan 4.191. Las actividades inmobiliarias por cuenta de terceros han bajado en 364, por lo que ahora quedan 853 (antes superaban con creces el millar).

Acompañando a la caída de la construcción está el descenso de la fabricación de productos cerámicos para edificación. Había 84 y ahora quedan 76 (8 menos). También han caído en 318 las empresas que fabricaban elementos metálicos para construcción (quedan 1.561), las que fabrican elementos de hormigón, cemento y yeso (hay 54 menos, quedan 263) y las que se dedican al corte, tallado y acabado de piedra, que han bajado de 256 a 227. La fabricación de muebles también ha pegado un bajón. Antes de la crisis había 1.312 empresas y ahora hay 1.069. Son 243 menos.

Todos estos casos suman 9.578 empresas menos. ¿Recuerdan la cifra del comienzo de página? En cinco años hay 10.000 empresas menos de todos los sectores en Castilla-La Mancha. Unos suben y otros bajan, pero prácticamente el 100% del saldo negativo sale del pinchazo inmobiliario.