Se dice que el baloncesto tiene una magia especial y así quedó demostrado ayer en el Pabellón del Parque, en el primer partido como local esta temporada del Albacete Basket. Cuando el encuentro parecía encarrilado del lado visitante, con un Basket Quintanar 10 puntos arriba y mucha impotencia ofensiva en el bando local, todo  dio un giro inesperado y con un parcial de 22-0 en los últimos siete minutos, la victoria cayó del lado albaceteño.

El partido comenzó con un sentido homenaje para Diego Fox en los prolegómenos y el hispano-argentino respondió siendo uno de los mejores del encuentro, aunque la estrella local fue Slawson, repitiendo prácticamente los números de la primera jornada y siendo el sustento ofensivo del equipo en muchos momentos.

Quintanar, con el albaceteño Alejandro González en el banquillo, presentaba un equipo muy físico y con buenas individualidades, mientras que los locales evidenciaban todavía falta de acoplamiento, además de que en muchos momentos se echó de menos la presencia de Ferry y sus triples en momentos decisivos.

El primer cuarto, con ambos conjuntos muy frescos, fue una lucha muy igualada, sobre todo debajo de los tableros, siempre con mínimas ventajas para los conquenses. Diouf y Carter se imponían bajo el aro, mientras que el Albacete Basket no encontraba su ritmo de juego. El buen trabajo defensivo de unos y otros dejaba el marcador en 14-16.

El segundo cuarto fue por los mismos derroteros, con el bosnio Gacic mostrando su clase pero evidenciando todavía falta de acoplamiento con sus compañeros, lo mismo que un trabajador Gray que no encontraba la recompensa del acierto cara al aro. Cinco puntos consecutivos de Fox pusieron al Albacete con ventaja, que llegó a nueve puntos, aunque un triple de Carlos Gil dejó el marcador con un 38-33 al descanso.

ZONA VISITANTE. La segunda mitad empezó bien para los de Alfredo Gálvez, pero la defensa en zona planteada por el Quintanar empezó a atragantarse al no encontrar posiciones cómodas de tiro. Ahí fue cuando más se echó en falta la presencia de Ferry. Además Slawson cometía su cuarta falta y el Quintanar aprovechaba para cerrar el tercer periodo con ventaja (47-53).

El último cuarto comenzó igual, con un Albacete Basket atascado en ataque y un Quintanar poderoso en el rebote, logrando segundas y tercera opciones con las que logró una máxima ventaja de 10 puntos a falta de siete minutos para el final del choque (51-61).

Sinceramente el partido parecía encarrilado para los conquenses por la impotencia local de cara al aro, pero apareció Fox para marcar un triple que animó la contienda y por fin Gray rompió su sequía y anotó dos triples más con los que el Albacete volvía a entrar en el partido (63-61) a falta de 4:30 para el final, con Slawson otra vez en pista poniendo orden bajo los tableros.

Al Quintanar se fundieron los plomos. Con sus mejores hombres cargados de faltas, sin ideas y desacertados, los puntos fueron cayendo del lado local hasta completar un sorprendente parcial de 22-0 (73-61). Los conquenses no fueron capaces de anotar ni un sólo punto en los últimos siete minutos y el Albacete Basket protagonizó una espectacular remontada con la que ganó un partido muy complicado.