Un lujo de equipo (3-0)

Juan Carrizo
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El mejor Albacete pasó por encima de un desdibujado Almería y da un salto en la tabla

El Albacete pasó por encima del Almería en el mejor partido de los de Luis César en lo que va de temporada. Cierto es que el rival evidenció problemas y no mostró su mejor cara, pero mucho mérito tuvo en ello el gran trabajo de un Albacete cuyos jugadores trabajaron en perfecta conexión y fueron muy superiores a su rival.

El partido se presentaba interesante, pues el Almería es el conjunto con el límite salarial más alto de la Segunda División y claramente un aspirante al ascenso. El Albacete llegaba con la moral alta tras el empate trabajado y con un hombre menos ante el Mirandés, mientras que los andaluces habían perdido sus dos partidos anteriores, tres derrotas en las cinco jornadas disputadas, con su entrenador ya en la cuerda floja.

Nada más empezar, rompió el partido un gol de Samu, con la colaboración de Fran Vélez, central del Almería que tendrá pesadillas, pues su actuación ayer dejó mucho que desear. Con 1-0 en el primer minuto las cosas se ven de otra manera y para el Almería, tocado en su moral, fue un lastre que no consiguió superar en ningún momento.

La ventaja otorgó tranquilidad a un Albacete que incluso dejó el balón en los pies del Almería, viendo que la fragilidad de su defensa propiciaba la oportunidad de matar el partido al contragolpe. Los acercamientos visitantes al área defendida por el joven Hugo Eyre generaban algún desasosiego, pero la sobriedad de Pulido y Miguel Núñez se encargaba de desbaratar cualquier acción e incluso Hugo actuaba con templanza cuando la ocasión lo requería, como en un disparo lejano de Iago Díaz que rechazó el guardameta del Albacete y otro de Iván Sánchez en el que se quedó con el balón en las manos.

Las internadas de Santi Jara por la derecha generaban mucho peligro, más cuando Antoñito se incorporaba al ataque. Pero los centros no encontraban rematador. Casto tuvo que intervenir en una que cazó Jona en el 34, pero nada pudo hacer en el 38 en una acción muy bien trenzada en la que el balón llegó a Portu, que por potencia se fue directo a la portería y remató sin opción para Casto.

El trabajo de Edu Ramos yMario Ortiz en el centro del campo era espectacular, igual que el de toda la defensa, y el Albacete se iba al descanso con una claro 2-0, pero enfrente estaba un Almería con jugadores de primer nivel, por lo que no había margen para las confianzas.

CONTROL. Tras la reanudación el Albacete supo controlar el choque en todo momento y el Almería, totalmente desdibujado, apenas dio muestras de poner dar la vuelta al encuentro. El doble cambio realizado por Sergi Barjuán no cambió el panorama y el Albacete jugaba con la tranquilidad que otorgaba el marcador y el aliento de una afición que, a pesar de la lluvia, estaba disfrutando con su equipo.

Hugo se convirtió en un mero espectador y si algún balón llegaba por el aire, única opción para que el Almería pudiera pisar el área manchega, por allí aparecía Pulido para resolver cualquier situación. El descontrol visitante se empezó a hacer más evidente y los huecos en su defensa fueron aumentando, lo que posibilitó que el Albacete buscara con insistencia el tanto que sentenciara el choque. Apesar de la ventaja adquirida todo el mundo tenía claro que un gol del Almería podría meter en el partido a los andaluces.

Casto tuvo mucho trabajo y lo intentó resolver con acierto, mientras que su defensa se descomponía igual que el resto del conjunto almeriense. Entre las varias opciones que tuvo el Albacete hay que destacar un remate de Jona con gran intervención del portero que formó parte de la cantera del conjunto manchego hace muchos años, y otro de Portu en un intento de marcar de tacón en el que Casto estuvo muy bien colocado para abortar la acción.

La salida de César Díaz dio un nuevo aire al ataque manchego. La potencia y velocidad del jugador de Villamalea fue mucho ya para un equipo roto como era el Almería, y cuando apenas llevaba un minuto sobre el terreno de juego culminó una gran jugada colectiva con un quiebro en el área y un disparo que tocó lo justo en el defensa para que Casto no pudiera hacer nada. Era el 3-0 que certificaba para el Albacete una victoria de enjundia ante uno de los gallitos de la categoría.

Con este triunfo el Alba se coloca en la décima posición y a sólo dos puntos del segundo puesto.