El Albacete afronta su último partido en el Carlos Belmonte de la temporada con el enorme desencanto que supuso el descenso matemático del equipo el pasado miércoles al ser incapaces de ganar en Ponferrada. Era la crónica de un descenso anunciado, pero se podía haber apurado las últimas opciones con algún resultado positivo en las últimas jornadas.
En Ponferrada el equipo no jugó mal, incluso por momentos fue superior al cuadro local, pero adoleció de las mismas carencias que durante todo el año lo han tenido en la parte baja de la tabla, la falta de eficacia goleadora y la excesiva fragilidad defensiva.
Consumado pues el descenso matemático le quedan al conjunto manchego dos partidos en los que intentar, por lo menos, terminar la temporada con dignidad, el primero de ellos hoy en el Belmonte a partir de las 20 horas. Enfrente estará un Bilbao Athletic que lleva ya algunas jornadas más descendido matemáticamente, lo que lo hace quizás todavía más peligroso.
Y es que el filial está formado por jugadores cuya pretensión es alcanzar el primer equipo, o bien encontrar acomodo en otro club de Primera o Segunda. Por ello, quitada la presión que puede imponer la clasificación, puede resultar ahora mismo el rival más peligroso al que enfrentarse y bien lo sabe César Ferrando, que ha pedido a sus jugadores que deben ser más que nunca un equipo, no vaya a ser que los cachorros les pinten la cara y la amarga despedida de la afición sea todavía peor.
Por lo menos no estará en el Bilbao Athletic su delantero Aketxe, que en plena racha goleadora sufrió una grave lesión en el pasado partido frente al Alavés, en el que el filial bilbaíno le plantó cara al líder y máximo candidato al ascenso en estos momentos. Muchas bajas tiene el conjunto vasco pues han sido varios los jugadores que durante la temporada han ido sufriendo lesiones importantes. De su último encuentro, además de Aketxe, será baja Óscar Gil, por tarjetas. Saborit y Andoni López serán sus sustitutos en la lista de convocados.
CON LO JUSTO. Al bajón de moral que en estos momentos aflige al vestuario manchego se tiene que unir el carrusel de bajas que César Ferrando tiene para este partido. Ya anunció el técnico que los chavales que entrenan con el primer equipo tendrán su oportunidad en estas dos últimas jornadas, algo que va a tener que ser casi obligado a tenor de las ausencias. Alos lesionados de larga duración Edu Ramos y Cidoncha ya se unió la semana anterior Víctor Curto y después del partido en Ponferrada ha caído también Jona y, previsiblemente, Diego Benito, aunque el madrileño se entrenó ayer con normalidad, si bien la sesión no fue con la intensidad suficiente para saber si está en disposición de jugar o no. Aestas bajas se unen tres sancionados por acumulación, Gonzalo, Mario Ortiz y Rubén Cruz.
Así las cosas, el único delantero a disposición de Ferrando es César Díaz, mientras que para la defensa lo normal es que Adri Gómez entre por Gonzalo y Paredes se quede en el banquillo, porque repetir la defensa de cinco no dejaría opción en el banquillo para solucionar cualquier tipo de problema. En la portería lo normal es que jugase Dorronsoro, o incluso Dani Mallo, aunque Ferrando también le quiere dar minutos a Héctor Pizana. Carrasco e Iván Cifuentes podrían tener su oportunidad a lo largo del partido o incluso de inicio.