El pintor y dibujante Luis Bermejo muere en Mallorca

V.M.
-

Nacido en Madrid, el artista vivió en Albacete durante las décadas de los 30 y 40 del pasado siglo, ciudad a la que regresó para exponer sus acuarelas y óleos en diversas ocasiones

El pintor y dibujante Luis Bermejo, muy ligado a esta tierra, fallecía recientemente en su domicilio de Palma de Mallorca a los 84 años de edad. Nacido en Madrid, el 12 de agosto de 1931, Bermejo fue uno de los dibujantes de tebeos más influyentes en nuestro país desde los años 60 del pasado siglo y poseía un estilo fácilmente reconocible.

Con apenas siete u ocho años de edad su familia se instalaba en Albacete, donde Bermejo cursos sus primeros estudios  y vivió hasta los 20 años, desplazándose  a de nuevo a Madrid y a la Ciudad Condal para abrirse camino como dibujante y posteriormente a Mallorca. Desde finales de los 80, el artista comenzó a centrarse en su faceta como pintor y expuso en diversas capitales, entre ellas Albacete, «una ciudad a la que siempre estoy encantado de regresar», solía confesar a La Tribuna.

De su etapa como ilustrador de historietas, cabe mencionar El rey del mar, Las aventuras del FBI, que realizó para Editorial Rollán, Selecciones ilustradas o Apache.   A finales de los 50 comenzaba a trabajar para el mercado británico en títulos como Girls Crystal y Tarzan Weekly  y en los 60 cultivó series y publicaciones como Thriller Picture, War, Dick Daring, John Steel o Johnny Future.  

Ya en la década de los 80 colaboró en series como Orka o con historias cortas en revistas como Metropol o Zona 84, así como una  recordada adaptación de El señor de los anillos en tres tomos para Toutain Editor, que llegó a publicarse en  diversos países europeos:Alemania, Dinamarca, Finlandia, Islandia, Italia, Holanda, o Suecia. A finales de ese decenio llegó a   participar como  dibujante en algunas aventuras de El Capitán Trueno con guiones de Víctor Mora para Bruguera y posteriormente para Planeta DeAgostini. Ya en los 90, aunque centrado más en la pintura, dibujó uno de los tomos de Relatos del Nuevo Mundo y el libro El sueño eterno, adaptación de la obra de Raymond Chandler realizada por Andreu Martín.

Como pintor evidenció una especial predilección por la acuarela, género en el que fue un maestro consumado, aunque también cultivó el óleo y el pastel. En sus recordadas exposiciones en nuestra capital: Bancaja, sala de CCM, Centro Cultural La Asunción... siempre acompañado por su amigo y representante, Manuel García Gómez, dejó constancia de su talento y como el propio doctor en Bellas Arte Juan Amo aseguraba en el prólogo de una de ellas:«Bermejo, honrado y excelente acuarelista, implica en toda su poética plástica, el valor del dibujo con lo que complementa y magnifica su pintura».

Quedan para la posteridad sus composiciones amables de marinas y jardines inundados de luz, esas figuras característicos de frailes, coleccionistas de arte, jeques árabes, mujeres en animada conversación... una temática especialmente cultivada en la acuarela, donde su dominio del dibujo y la composición no dejaban de sorprender al visitante ante el genio de un artista admirable.