El Ayuntamiento de San Pedro ha dado los primeros pasos en busca de su propósito de lograr que el yacimiento arqueológico de La Quéjola sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC). El alcalde de la localidad, Daniel Sancha, explicó que han contratado los servicios de una arqueóloga que está elaborando toda la documentación y han mantenido ya las primeras reuniones con técnicos del Servicio de Patrimonio para saber qué trámites deben cumplir. «Nos han aconsejado focalizar la protección en el yacimiento», detalló el regidor local, de ahí que estos trabajos previos se centren en la Dehesa de la Quéjola. Una vez elaborados los informes, debe ser el pleno del Ayuntamiento de San Pedro el órgano que acuerde la solicitud y la Comisión Provincial de Patrimonio quien resuelva si es acertada, o no, tal declaración.