Una vuelta al mundo por las orillas del Júcar

E.F. / latribunadealbacete.es
-

Cada verano, la Confederación Hidrográfica debe realizar trabajos de mantenimiento en sus 50.000 kilómetros de cauces, una longitud superior a la circunferencia de la Tierra

Fotografía del paraje de La Teja, correspondiente al tramo albaceteño del Júcar. - Foto: R.Serrallé

Si pusiéramos en línea todos los cauces y cursos que forman parte de la Demarcación Hidrográfica del Júcar, obtendríamos una recta de 50.000  kilómetros de largo, una distancia  algo mayor que la que presenta la circunferencia del Ecuador, que es de 40.000 kilómetros.

Y una de las labores de la Confederación Hidrográfica del Júcar es mantener limpios esos 50.000 kilómetros de cauces para, por un lado, garantizar su capacidad de desagüe en caso de avenidas y, por otro, mantener los miles de ecosistemas fluviales que jalonan los cursos que forman parte de la CHJ.

Desde el año 2011, el organismo de Cuenca ha desarrollado en la provincia de Albacete una docena de proyectos de restauración de ríos y de mejora del Dominio Público Hidráulico, en diferentes grados, que van desde actuaciones puntuales en ayuntamientos concretos, a trabajos que abarcan tramos completos y, por tanto, varios términos municipales.

Como es lógico, es imposible mantener todos los cauces a la vez. Por eso, desde el Organismo de Cuenca, explican que  «se utilizan criterios técnicos de priorización sobre los tramos fluviales cuya problemática es conocida, bien por medio de las inspecciones de los Servicios encargados, bien a partir de las peticiones de intervención que formulan especialmente los Ayuntamientos».

Esto es, que se actúa de oficio, si los servicios técnicos de la CHJ detectan un problema grave, o a petición de los municipios. Y este año, « ya se ha ejecutado en torno al 50% de las labores previstas para 2014 de acondicionamiento y conservación de cauces». Estos trabajos, que finalizarán el próximo mes de noviembre, suman una inversión de un millón de euros, cantidad similar a la destinada en 2013. Hasta el momento, se han ejecutado unas 40 actuaciones en distintos tramos de la Demarcación del Júcar.

especies invasoras. Los trabajos que se realizan son de dos clases. En primer lugar, desbroces selectivos con eliminación de vegetación alóctona y retirada de especies invasoras, principalmente Arundo donax, o caña común, muy conocida en numerosos puntos de La Manchuela.  

Esta planta, originaria de Asia, ha desplazado a especies autóctonas, como el carrizo y la anea, y puede formar colonias tan densas  que alteran la circulación normal de las aguas. Además, su tallo es sumamente duro, en comparación a las especies autóctonas, lo que dificulta su erradicación.

El otro grupo de actuaciones consiste en   retirada de elementos obstructivos, aumento de la sección de desagüe, recuperación de riberas y consolidación de las motas de protección, para reforzar la seguridad y en caso de producirse repentinos incrementos del caudal.

La ejecución de estas labores puede llegar a prolongarse hasta el mes de noviembre pero, cada año, la CHJ intenta que la mayor parte de estos trabajos o, al menos, los más urgentes, se lleven a cabo durante la época veraniega, para que estén listos cuando lleguen las lluvias de otoño.

Para decidir qué actuaciones van primero, se establecen criterios: si ya se han hecho trabajos en la zona en años anteriores, si hay riesgo potencial de daños a bienes o personas, si se trata de cauces pertenecientes a espacios protegidos, si hay infraestructuras cercanas y, como es lógico, la tipología del terreno, el grado de complejidad de las obras y su coste.