Una oferta para entrenar al máximo nivel en Dinamarca ha retrasado su continuidad al frente del proyecto del Albacete Basket, pero al final Alfredo Gálvez seguirá dirigiendo los destinos del club verde la próxima temporada con el objetivo de recomponer el equipo y que siga siendo igual de competitivo.
P.- Por fin se ha confirmado su renovación, ¿está contento?
R.- La verdad es que sí, estoy contento por tomar la decisión de seguir aquí, ya son cuatro años y no estás tanto tiempo en un sitio si no estás contento.
P.- Temas laborales han complicado su continuidad, ¿qué ha pasado?
R.- Lo cierto es que el problema no era laboral porque yo acabo de trabajar por las tardes en un horario razonable para poder entrenar por las noches y por las mañanas el entrenador ayudante puede hacer un trabajo más específico, el problema ha sido que tenía una propuesta para entrenar fuera de España y hasta última hora he estado barajando la posibilidad de marcharme fuera porque es algo que llevo varios años pensando, pero al final no se han dado las condiciones para que me marchara. Era una oferta en Dinamarca, en Primera División, y al final me he quedado aquí porque tenía claro que si entrenaba en España no hay otro sitio donde yo vaya a entrenar que no sea el Albacete Basket porque es mi club.
P.- Cuando le llaman para entrenar en Dinamarca es porque conocen su trabajo.
R.- Está claro que es gracias al Albacete Basket, al trabajo que se está haciendo aquí, de hecho la propuesta es parecida al trabajo que se ha venido haciendo aquí, una filosofía similar y gracias a eso he tenido esta propuesta. Espero que en un futuro vuelva a tener la posibilidad porque tengo la ilusión de entrenar en el extranjero y espero hacerlo en un futuro.
P.- Es la cuarta temporada del club con usted al frente en un proyecto consolidado.
R.- La gente nos recuerda que ya no somos el novato, que es el cuarto año del club y hay mucha exigencia. Creo que eso es bueno porque hace que la gente que está en el club también seamos exigentes con nosotros mismos. El proyecto está económica y deportivamente consolidad, hemos pasado lo más difícil que son los inicios y creo que lo hemos pasado con nota. Ahora hay una reestructuración en la directiva, hay un nuevo grupo de trabajo y la verdad es que estoy muy ilusionado y la directiva también.
P.- Han disputado dos play off en los que se rozó el ascenso, ¿qué objetivo tendrán para la próxima temporada?
R.- Siempre es complicado, este año creo que hay 84 equipos en la Liga EBA y sólo ascienden cuatro, además la competición será la que marque. Creo que va a aumentar el nivel porque hay equipos que han visto que con trabajo en la confección de la plantilla se pueden hacer grandes cosas como hemos hecho nosotros. Se tienen que dar muchos factores y tener un poco de fortuna con el tema de las lesiones, no puedes tener previsto todo porque puede pasar lo que nos sucedió a nosotros que el base Briscoe tuvo un problema familiar y se tuvo que marchar. Pero siempre aquí siempre ha habido máxima exigencia, la gente está muy enganchada al equipo, por eso vamos a intentar tener un grupo muy competitivo, le vamos a dar otro aire, vamos a intentar que la gente de la cantera, no sólo la del júnior, sino la de todas las canteras que hay en la ciudad pueda tener más participación, aunque creo que a los jóvenes les falta un poco, pero vamos a intentar de alguna manera ponerles un escalón para que puedan ir subiendo. Trataremos de dar un giro para recomponer la plantilla y no perder competitividad, que es lo difícil. Ahora mismo somos uno de los rivales a batir, son dos subcampeonatos consecutivos, dos segundos puestos en fases de ascenso y la verdad es que ya no se nos mira como uno más, sino como uno de lo favoritos. No solemos poner paños calientes y como siempre el Albacete Basket intentará competir contra todos y que se escapen pocos partidos del pabellón del Parque.
P.- Además de entrenador, la próxima temporada será director deportivo y tendrá que coordinar la cantera, ¿será mucho trabajo?
R.- Ya lo he tenido estos años, pero el próximo, si cabe, tendré más. Estamos confeccionando un equipo de trabajo muy interesante, no voy a estar solo, yo realizaré una labor de coordinación y de dirección aparte de llevar el primer equipo, pero estaré muy encima del equipo vinculado de Tobarra, muy encima del júnior y estamos muy ilusionados con este proyecto porque con la experiencia que tenemos nos parece que es la dirección que tiene que tomar no sólo el Albacete Basket, sino cualquier club por la situación actual.
P.- En el baloncesto los jugadores cambian mucho de equipo, del año pasado ¿van a continuar muchos?
R.- Ya se ha confirmado la renovación de Diego Fox, para mí es algo fundamenta porque es un jugador veterano, que ha tenido una grave lesión y que se está recuperando y en un par de meses va a estar al 100%, también ha renovado Uge Gómez, que el año pasado también tuvo una lesión de rodilla y está completamente recuperado. Pero vamos a tener muchísimas bajas, la mayoría porque van a mejorar como Slawson que tiene una importante oferta para jugar en una categoría importante en el extranjero, Andrew Ferry va a jugar en Primera División en Portugal, Manolo Blázquez va a jugar en La Roda, algo entendible porque es el club en el que ha jugado muchas temporadas y quiere jugar allí. Seguirá también Vilches y el resto del equipo va a ser nuevo porque habrá otros jugadores que no renovarán. Es algo lógico que quieran mejorar porque son gente joven y entiendo que es un éxito del club el que haya tres o cuatro jugadores con ofertas para jugar a nivel profesional.
P.- Ahora tendrán que hacer un gran esfuerzo para componer el equipo porque además ha cambiado la normativa sobre los extranjeros.
R.- Ha cambiado en el tema de los pasaportes, lo que pide la Federación es que el jugador tenga dos pasaportes tenga realmente una vinculación con ellos porque en estas últimas temporadas ha habido bastantes follones. A nivel de jugadores extranjeros la limitación que pone la Federación es que tiene que haber siete jugadores nacionales en la primera plantilla, lo que deja un margen amplio para que los equipos fichen jugadores extranjeros.