Los aviones F-22, también conocidos como invisibles, ya que son indetectables por los radares, visitaron ayer la Base Aérea de Albacete, tras realizar el primer ejercicio conjunto de estas aeronaves en suelo español.

En concreto, los dos aviones estadounidenses, que se desplazaron ayer desde Alemania para el evento y que realizaron dos maniobras de reabastecimiento en vuelo, llevaron a cabo dos ejercicios de entrenamiento.

En el primero de ellos un F-22 se enfrentó con un F-18 de la Base Aérea de Torrejón, y en el segundo, el otro F-22 combatió con dos Eurofighter de la Base Aérea de Los Llanos, como explicaba el piloto de una de las aeronaves estadounidenses, el comandante Fryer. «Básicamente el ejercicio ha sido de proximidad de contacto aéreo, para ver como nos desenvolvíamos cada uno en relación a la otra plataforma».

El capitán de los Pinos, piloto de uno de los Eurofighter albacetenses, concretaba más. «He estado implicado en uno de los combates, luchando contra uno de los F-22. Hemos hecho un combate visual, de tal modo que hemos tenido que forzar el avión hasta sus máximas características, para ver si conseguíamos derribar, de manera simulada al F-22 con nuestros dos Eurofighter, mientras él hacía tácticas defensivas».

Además, añadía que el Eurofigther puede competir con el F-22 casi de igual a igual. «Hemos podido comprobar que las características del avión F-22 son bastante equiparables a las del Eurofigther, si bien, al ser la primera vez que hemos luchado con un avión de semejantes características hemos visto algunas cosas que nunca habíamos visto antes, en cuanto a la forma de proceder y en cuanto a las maniobras».

Por su parte, el capitán Sanz, piloto del F-18 venido de Torrejón, se mostraba satisfecho con el ejercicio.