La gestión migratoria crea una guerra entre Italia y Francia

SPC
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El Ejecutivo de Conte exige «disculpas inmediatas» a Macron por sus críticas al cierre de los puertos transalpinos, llama a consultas al embajador galo y deja en el aire una cumbre bilateral

La decisión de Italia de no permitir la entrada en sus puertos al Aquarius, con 630 migrantes a bordo, no solo ha costado las críticas al nuevo Gobierno de Giuseppe Conte y a su ministro del Interior, el ultraderechista Matteo Salvini, sino que, además, ha tenido un efecto colateral inesperado, ya que ha derivado en una tensión diplomática entre la nación transalpina y Francia por las palabras vertidas el pasado martes desde París contra la actuación de Roma, al tildar de «cínica e irresponsable» la decisión de no aceptar a los sin papeles.

La crisis inició ayer su escalada con la convocatoria del Ministerio de Exteriores italiano al embajador francés en el país para comunicarle que «el Ejecutivo considera inaceptables las palabras usadas, también a nivel gubernamental, desde París sobre la cuestión del Aquarius». 

A la espera de que el Elíseo emita «disculpas inmediatas», el titular de Economía transalpino, Giovanni Tria, canceló una reunión en la capital gala con su homólogo francés, Bruno Le Maire, en un nuevo gesto de desagravio del Gabinete de Conte hacia sus vecinos. Y esta situación podría ir a peor, ya que el primer ministro podría, incluso, suspender la cumbre bilateral con el presidente Emmanuel Macron, prevista para mañana.

«Sin una disculpa oficial, Conte no haría bien en ir a París», aseveró al respecto Salvini, quien manifestó la indignación del Gobierno al considerar que, al margen de las «explicaciones» que pueda dar el embajador por «los insultos dirigidos, no solo al Gobierno, sino a un pueblo entre los primeros en el mundo en solidaridad y acogida», Francia debería disculparse.

«Si los franceses tuvieran la humildad de pedir disculpas, punto y raya, amigos como antes y trabajamos en el interés de todos, pero insultos por parte de quien rechaza y quien cierra los puertos, no los aceptamos», recalcó.