El 4 de diciembre se celebraron las elecciones sindicales del profesorado, en las que el sindicato ANPE no sólo logró su mejor resultado en la provincia, con 15 de los 31 delegados (46,27%), sino que ha mejorado su representación como primer sindicato en la región y ha ganado también a nivel nacional. Un «triplete» logrado con Martín Navarro Sánchez en la Presidencia de esta organización en la provincia y en la Vicepresidencia regional.

¿Qué sensación le queda con estos resultados que ANPE ha calificado de «históricos»?

Eran mis primeras elecciones como presidente y el reconocimiento de los docentes hacia nuestro trabajo, independencia y profesionalidad es de agradecer, y la confianza que nos  depositan por otros cuatro años.

Es el fruto del trabajo y el compromiso de mis compañeros y compañeras y del respaldo de los 3.500 afiliados que tenemos en la provincia, de 5.000 docentes.

¿A qué cree que se ha debido?

Mi impresión es que se ha reconocido el trabajo del sindicalismo profesional, independiente y sectorial, porque nosotros somos un sindicato que representa exclusivamente a los docentes de enseñanza pública. Estamos alejados de confrontaciones políticas y de idearios y lo que nos interesa es mejorar la educación pública y conseguir mejores condiciones laborales y salariales.

La mejora de la educación pública redunda directamente en la sociedad y garantiza un avance y progreso social.

¿Cuáles han sido los principales compromisos planteados?

Seguir en la línea en la que estamos. Hicimos una campaña en torno a la equiparación salarial en relación a docentes de otras comunidades y hemos conseguido avances, pero hay que seguir trabajando.

Hay diferencias, por ejemplo, en materia de licencias y permisos en casos como matrimonio de hijos o fallecimiento de tíos o sobrinos, o en la incapacidad temporal, que en Castilla-La Mancha nos siguen quitando dinero cuando estamos de baja y en otras comunidades no. Y en temas retributivos, en País Vasco los docentes cobran al año 6.000 euros brutos más que los de aquí.

Los docentes, en todo el Estado, tenemos el mismo sistema de acceso y de jubilación, al ser, por Ley, cuerpos estatales. Entramos y salimos de la misma manera, pero durante el trayecto, las condiciones laborales son distintas, pese a estar haciendo el mismo trabajo. Una igualdad que también debe estar en el tema del idioma, que no se nos ponga barreras de acceso en otras comunidades por esta cuestión.

¿Por dónde pasa la solución?

Apostamos por un pacto educativo, por un acuerdo, que dure, al menos, una generación. Que se pongan de acuerdo en un acuerdo de mínimos, que en ANPE lo vamos a apoyar.

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