Es la procesión que más ha crecido en número de participantes durante los últimos años de la Semana Santa albacetense. Centenares de chavales, de entre cuatro y 12 años de edad en su mayoría (aunque vimos vestidos con túnicas a pequeños que rondaban el año), desfilaron ayer en la entrañable procesión Dejad que los niños se acerquen a mí portando réplicas exactas de imágenes de ocho hermandades. Alrededor de 2.500 niños portaron las réplicas de 13 pasos con la misma devoción que muestran los nazarenos veteranos y sin que faltasen faltasen los redobles de tambor y el sonido agudo de las cornetas.
El desfile comenzaba poco después de las 18 horas, con unos minutos de retraso debido a la aglomeración de personas en la calle del Ángel, a la puerta de la parroquia de las Angustias. La agradable tarde primaveral propició  una mayor  afluencia de ciudadanos para presenciar la procesión, que transcurrió por la ya citada calle  Ángel, Avenida de España, Muñoz Seca, Cristóbal Lozano, Doctor Beltrán Mateos y concluía en la residencia de ancianos San Antón, donde una los nazarenos infantiles mantuvieron un emotivo encuentro con los residentes.

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