Entre 3.000 y 4.000 albacetenses padecen epilepsia, una enfermedad neurológica crónica, de la que en la mayoría de los casos se desconocen sus causas, que se produce porque una parte del cerebro o todo a la vez produce una descarga eléctrica anormal. Hoy por hoy esta patología no tiene curación, a pesar de los avances en fármacos que se están produciendo que han multiplicado por tres las posibilidades de tratamiento.

Precisamente, esta semana se celebraba el Día Mundial de la Epilepsia, un trastorno cerebral que hace que las personas tengan convulsiones recurrentes, que afecta a personas de todas las edades. Esta dolencia es causada por lesiones cerebrales, alteraciones genéticas, tumores o secuelas de la meningitis, entre otras. Aprovechando esta celebración desde el servicio de Neurología del Área Integrada de Albacete aconsejaron a la población que ante un ataque epiléptico es importante colocar a la persona de lado para mantener despejadas las vías aéreas;eliminar objetos peligrosos de alrededor y proteger la cabeza colocando algo blando bajo ella; aflojar la ropa, corbatas, cinturón; no introducir objetos en la boca ni dar agua y hablar despacio y tranquilizar al paciente afectado cuando vuelva la consciencia.

Con el fin de hacer un diagnóstico más certero de la epilepsia es por lo que los neurólogos vuelven a demandar la puesta en marcha en el Área Integrada de Albacete de una Unidad de Epilepsia, para poder hacer registros del sueño más amplios y diagnósticos más precisos en los casos que no claros, dado que hay pacientes que llevan años tratados de epilepsia y que luego resulta que tienen un trastorno del sueño o un trastorno psiquiátrico.