Francisco Pardo, portavoz del grupo municipal socialista, que ayer anunció su renuncia a presentarse a las primarias de su partido y su próxima retirada de la política activa, compareció ante los medios de comunicación para calificar de «uno más», y «algo que no es precisamente muy  positivo para las cuentas municipales» el plan de reducción de la deuda elaborado y aprobado recientemente por el equipo de Gobierno que preside Francisco Núñez.

Para el dirigente socialista, la memoria que acompaña al PRD arroja datos muy significativos. «El primero de ellos -señaló- es que el Ayuntamiento ya ha superado el umbral del 85 por ciento de endeudamiento, lo que significa que ya  vamos de la mano de la tutela del Ministerio de Hacienda», señaló.

cuentas. Pardo aseguró que el equipo de Gobierno se estaba viendo abocado a «maquillar» la realidad, a establecer una memoria de medidas para poder encauzar las cuentas municipales. «No decimos que mientan, no, pero sí proceden a disfrazar las previsiones, tanto de los gastos, como del capítulo de los  ingresos».

Para el dirigente socialista, resulta «chocante» que el equipo de Gobierno anuncie un ahorro de 75.000 euros  porque «va a obligar al gobierno regional a asumir diversas competencias en comedores escolares y drogodependencias, cuando sabemos que precisamente las políticas del Gobierno Regional han sido, y son, de no asumir ni una sola competencia, y sí al contrario», subrayó Pardo.

En cuanto a lo que se anuncia en el PRD de control del gasto, Pardo señaló que, «todos sabemos que Núñez ha sido incapaz de cumplir ni uno solo de los ya numerosos planes de ajuste a los que se ha obligado desde el año 2007».

Pero lo más grave para el portavoz socialista, es el anuncio del PRD de reducción de 30.000 euros en políticas sociales. «Es increíble la versión del equipo de Gobierno al anunciar esa reducción porque a su juicio estamos saliendo de la crisis; algo que solamente perciben en sus cuentas corrientes Cospedal, su esposo y el alcalde de Almansa», subrayó Pardo.

 El ahorro en la supresión de la Batalla y el FIMA, «no decimos nada, ya  se comenta por sí mismo».