Vencer dudas con un café o un zumo... y tiempo

E. Real Jiménez
-

Cardiólogos albacetenses impulsaron la II edición de 'Meriendas del Corazón', con una primera sesión dedicada al electrocardiograma y que se volverá a repetir, por la buena respuesta, el jueves

Imagen de archivo de una intervención de corazón. - Foto: Luis López Araico

La fórmula no es nueva, pero se ha demostrado exitosa. Alrededor de un café, hablar de temas que apasionan, competen o preocupan. Es lo que, por segundo año, un grupo de siete cardiólogos del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete (con una excepción, del de Hellín) han impulsado con un llamativo eslogan: Meriendas del corazón.

La primera edición se llevó a cabo el año pasado y despertó ya gran interés por parte de profesionales sanitarios de diversos campos de la Medicina, con el nexo común de la incidencia de este órgano capital. «Lo impulsamos el año pasado y culminó en el Congreso Nacional de ‘Cardiocete’, al que vinieron más de 200 participantes de toda España», recuerda el cardiólogo Jesús Jiménez Mazuecos, jefe de Sección de Cardiología  del Hospital de Albacete. Por eso, por la demanda, «asistieron alrededor de 500 personas entre todas las charlas», se repiten ‘las meriendas’ y en 2020 «seguiremos con la segunda edición del Cardiocete». Un mismo equipo docente de Cardiología implicado al 100% en todas estas actividades.

Con este ánimo acaba de arrancar, esta misma semana, esta segunda hornada de Meriendas del Corazón. Con tal éxito en la primera de las actividades programadas que «hemos tenido que desdoblarla, y que programarla de nuevo. La repetimos el 7 de febrero», resalta Jiménez Mazuecos.

Aunque el formato es más llamativo que una lección magistral, esta actividad forma parte del plan de formación anual del Servicio de Cardiología. «La pretensión es dedicar tardes de nuestro tiempo libre a formarnos entre todos, tanto cardiólogos como no cardiólogos, con especialidades afines» y, en un entorno distendido, «discutir, en torno a casos prácticos, situaciones cotidianas, de problemas a los que nos enfrentamos».

La vorágine diaria a la que estos profesionales se enfrentan en su lugar de trabajo no les permite intercambiar impresiones, y «mucho menos ponernos a hablar cuatro o cinco horas de un asunto concreto». De ahí que se hallara este formato como ideal.

La de este jueves sobrepasó las expectativas planteadas por los organizadores, que inicialmente buscaban «aulas pequeñas, para poder irnos pasando todos el micrófono» y prueba de ello es que se repite este jueves. Esto evidencia que el tema elegido apasiona a los profesionales, algo que, sin duda, los pacientes agradecemos.

MÁS INFORMACIÓN EN EDICIÓN IMPRESA