El Tudespensa.com Agrícola Villarrobledo sumó su segundo triunfo consecutivo de la temporada ante el Covibar Rivas. Lo hizo, casi sin esfuerzo. El equipo albaceteño se dejó llevar en el primer cuarto, pero cuando quiso romper el partido lo rompió, y de qué manera. Diop, que terminó con 19 puntos y 15 rebotes en su haber, se erigió en el líder robleño. Bien acompañado por Miguel Molina (acabó con 17 puntos), el pívot aniquiló al Covivar en un abrir y cerrar de ojos.

Los madrileños sólo aguantaron en el primer asalto (12-11). A través de una sólida defensa pusieron en aprietos al Villarrobledo, pero cuando el esfuerzo comenzó a pasar factura se desmoronaron como un castillo de naipes. En esas apareció Diop, que hizo en la pintura lo que quiso y puso las cosas en sus sitio. El senegalés rompió él solito el partido en un segundo cuarto robleño para enmarcar (21-12).

Al Villarrobledo le entró todo y, de paso, consiguió amordazar al ataque de un Covibar que con el paso de los minutos fue a menos.  El Villarrobledo llegó al descanso con 10 puntos de ventaja en el electrónico (33-23).

La reanudación fue una calcomanía del arranque del partido, aunque esta vez ambos equipos se mostraron más acertados de cara al aro. Las defensas brillaron por su ausencia y se impusieron los ataques, pero ni siquiera en esa circunstancia se encontró incómodo el Villarrobledo, que al término del tercer cuarto mantuvo una cómoda renta de ocho puntos.

A la postre, se demostró que esa renta no hacía justicia a la superioridad robleña. Diop y Miguel Molina volvieron a hacer irrupción en el último periodo y ahí se acabó todo. El Covibar fue un juguete roto en manos albaceteñas, confirmando lo sucedido en el segundo cuarto. En cuanto el cuadro madrileño flojeó en defensa el Villarrobledo hurgó en su herida, que con el paso de los minutos se hizo más grande hasta la bocina final.

En el otro partido de la jornada, el Albacete Basket ganó al Tenerife por 60-80 y durmió líder del grupo B de la Liga EBA.