Un grupo vecinal almanseño pone en marcha la Semana de la Carta Manuscrita

Luis Bonete
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Desde el pasado día domingo y hasta el sábado, a través de la iniciativa de un grupo de ciudadanos se procede en la localidad a promocionar el olvidado género epistolar

Un grupo de vecinos amantes de las letras, a propuesta de la almanseña Yolanda Laparra, han conformado un interesante grupo que desde el pasado día 17 y hasta el 23 de abril están volcados en la promoción del género «epistolar», y «revitalizar la tradición perdida de escribir cartas y echarlas al buzón físico para que alguien las reciba y experimente esa sensación ya olvidada», recuerda Laparra.

Según explica Laparra, pretenden que a lo largo de la presente semana todos los buzones se llenen de palabras bonitas. «Ahora solo abrimos el buzón esperando publicidad, una carta del banco, del seguro..., queremos , sobre todo, hacer partícipes de esta iniciativa a los más jóvenes para los que costumbre epistolar es ajena y desconocida», asegura.

hábito. Laparra recalcó que este proyecto está abierto a todo ciudadano que desee participar : particulares, institutos de enseñanza media, colegios, bibliotecas, empresas y otros diferentes colectivos. «Principalmente estamos intentando hacer partícipes a los institutos, ofreciéndoles la posibilidad de cartearse entre varios centros (respetando siempre la ley de protección de datos). A la iniciativa se han apuntado ya varios institutos de Almansa, Hellín, Cantabria, Murcia...», dice.

La iniciativa está recibiendo apoyos desde numerosos medios de comunicación como Radio Nacional, concretamente el programa Esto me suena. Asimismo, el Ayuntamiento de Almansa colabora subvencionando la impresión de los carteles.

Laparra remarca que desgraciadamente y más entre los jóvenes, se ha perdido el habito del envío de cartas. «Hemos realizado el experimento en los institutos de dar un sobre y un papel a los estudiantes, con el resultado de que ni siquiera saben dónde se pone el sello, qué o quién es el remitente». Somos conscientes de que las nuevas tecnologías son más rápidas y, quizá, más eficaces, pero el sabor, la complicidad y el ejercicio de reflexión que requiere la redacción de una carta no es comparable, según nuestro punto de vista y no debemos dejar que se pierda».

El principal objetivo es instaurar una semana al año como semana de la carta manuscrita.