Una cañería rota estropeó decenas de informes del Archivo Municipal

N.GARCÍA
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Funcionarios del Consistorio y un restaurador de Cuenca tratan de recuperar los legajos

La rotura de una tubería en elAyuntamiento de la capital ha provocado daños en algunos expedientes e informes que se encuentran en elArchivo Municipal, ubicado en la planta sótano de la Casa Consistorial y los funcionarios trabajan a contrarreloj para poder recuperar estos documentos.

La archivera municipal, Amalia Lozano, explicó que cuando llegaron el lunes por la mañana se encontraron con el problema, por lo que desconocen si la tubería se rompió ese mismo día o durante el fin de semana. Dijo que desde el minuto uno se pusieron a trabajar para evitar problemas y poder salvar la mayoría de los documentos. «Se actuó muy rápido» y eso evitó que se estropearan más informes, declaró, indicando que «cambiamos las cajas mojadas y colocamos ventiladores para secar los documentos».

El agua cayó por la pared llegando a inundar algunas zonas y los bomberos tuvieron que actuar para evitar males mayores. Tras eliminar el agua y retirar las cajas que se había mojado se colocaron deshumidificadores, declaró el concejal José Luis Serrallé, que agradeció a todos los trabajadores su colaboración para salvar los documentos.

Lozano declaró que existen 20 legajos (cajas llenas de documentos) más estropeados y es el restaurador, llegado desde Cuenca, el que está intentando su recuperación a base de ventilación y papel absorvente.

primeras 72 horas. El restaurador, Mariano Caballero, indicó que las primeras 72 horas son cruciales. «El problema es el que puede haber de aquí a unos meses porque se puede expandir el moho y contaminar los depósitos», declaró, indicando que se ha trabajado muy rápido para intentar evitar este problema.

Si los documentos se dañaran con hongos o microorganismos el problema sería mayor porque podría pasar a informes que están sanos, reseñó la archivera municipal.

Esperan que la normalidad llegue poco a poco a estas instalaciones municipales, que ahora mismo están repletas de ventiladores y maquinaria que absorbe la humedad, mientras los funcionarios trabajan por salvar los documentos.