Casi 800 ciudadanos hicieron cursos en 2014 para recuperar el carnet de conducir

JOSECHU GUILLAMON
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Alrededor de 400 cometieron delitos relacionados con la ingesta de alcohol o drogas o se negaron a soplar en los controles de carretera

A lo largo del pasado año, 770 conductores albacetenses se vieron obligados a participar en alguno de los 94 cursos de reeducación o sensibilización vial para recuperar el  carnet de conducir que habían perdido, bien por cometer un delito o por haberse quedado sin puntos, tras protagonizar diferentes infracciones, según los datos que maneja el teniente fiscal delegado de Seguridad Vial en la provincia de Albacete, Juan Pedro Guillén Oquendo. Una cifra que no puede compararse con la del año anterior, ya que no se reflejaba estadísticamente.

Cabe destacar que más de la mitad de los conductores que tuvieron que realizar cursos de este tipo cometieron un delito relacionado con la ingesta de alcohol y drogas. En concreto, se cometieron 390 delitos de conducción bajo los efectos del alcohol o de las drogas y todos los responsables perdieron el carné. A estos conductores hay que sumar otros 18 que cometieron un delito de desobediencia, por negarse a soplar o a hacerse análisis de sangre para evitar que se comprobara su estado de embriaguez.

Que se cometieran 390 delitos por ingerir bebidas alcohólicas no significa que no se detectara a más conductores ebrios, simplemente que no llevaban un grado de alcohol suficiente como para que se considerase delito.

Positivos. De los 130.003 conductores controlados en los 7.600 operativos que se colocaron en las carreteras de la provincia en 2014, 729 dieron positivo en alcohol y drogas. El teniente fiscal  de Seguridad Vial afirmaba que si se habían detectado tantos conductores ebrios era, entre otras cosas, porque la Policía y la Guardia Civil habían realizado más controles de alcoholemia que durante el año 2013.

Por otra parte, Guillén Oquendo comentaba que se está produciendo un cambio en el perfil del conductor ebrio. «Un dato que estamos viendo es que están aumentando mucho los delitos de consumo del alcohol en las mujeres. Antes se veían muy pocos casos y ahora se ven muchos en los últimos años, antes eran la excepción».

Si nos referimos a las drogas, cabe destacar que hasta ahora era complicado realizar las pruebas porque eran costosas y generalmente sólo se hacían cuando el conductor tenía síntomas de embriaguez y daba negativo en los test de alcoholemia, algo que ha cambiado en 2015. «El año que viene se incluirá también la droga en la estadística, porque con la droga teníamos el problema de que era una prueba muy cara y no era muy fiable, porque no daba una tasa de consumo y no se sabía a que tipo de droga se daba positivo, con lo que se tenía que hacer luego análisis de sangre. Ahora esto si es posible».

En cuanto al resto de conductores que perdieron el carné en 2014, se debe a que han cometido  diferentes infracciones o delitos que les han hecho quedarse sin ningún punto del carné, como excesos de velocidad o conducciones temerarias.

Por desgracia, muchas de las personas que habían perdido el carné hicieron caso omiso a la prohibición de conducir vehículos a motor y circularon por las carreteras de la provincia al volante de sus coches o al manillar de sus motos.

A lo largo de 2014, la Policía y la Guardia Civil detectaron a 198 conductores circulando sin el correspondiente permiso, bien porque se lo había retirado Tráfico por la pérdida total de puntos o bien porque nunca se lo habían sacado.

En cualquier caso, las cifras son más positivas que en el año anterior, en el que fueron detectadas 210 personas conduciendo sin carné, lo que supone un descenso del 5,7%.

En cuanto a las infracciones con resultado de muerte, se produjeron 21 en 2014, tres casos más que en el año 2013. Del total, ocho se registraron en vías principales (carreteras nacionales y autovías), nueve en carreteras secundarias y cuatro en población, que en palabras del propio Guillén Oquendo, «es lo que más ha subido».

Por suerte en el presente año parece que hay lugar para la esperanza. «En el año 2015 parece que el número de infracciones con resultado de muerte está bajando, aunque no podemos precipitarnos, porque el año aún no ha finalizado».