Cultura urbana viva

ANTONIO DÍAZ
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El Nido de Arte de la capital, que conserva hoy su ambiente original, vuelve a tener proyecto para continuar su andadura, aunque se encuentra actualmente con el inconveniente de la falta de licencia para abrir sus puertas

El Nido de Arte, calle Nueva de la capital, que abrió sus puertas en diciembre de 1978, es toda una institución cultural de Albacete. Por el café concierto han pasado los más importantes escritores y músicos nacionales. El club de jazz, con la excepción del Jazz Jambore Club de Barcelona, es la sala de música más antigua de España en su ubicación original. También nació una de las asociaciones más dinámicas e importantes, que tanto trabaja por la música, la Asociación de Amigos del Jazz, impulsada por el gerente del Nido de Arte, Germán Navarro Asensio, uno de los más finos programadores culturales, sólo hay que ver que por allí han pasado de Red House a Ara Malikian, pasando por Vargas Blues Band, Eva Cortés, Ximo Tébar, Olga Manzano, Perico Sambet, Quique González, Celia Mur, Ramón Cardo y un largo etcétera.

Germán Navarro confirmó que tuvieron que cerrar temporalmente hace unos cinco años, «con motivo de un estado hostil de enfermedad, pero ese cierre era provisional, porque ya en el proyecto inicial se contempló que lo que se hacía era para perdurar y estuvimos 33 años, pero es que todavía tenemos proyecto para este sitio y esto me gustaría que se comprendiese que aquí hay una inversión empresarial muy importante; la empresa es nuestra, así como la inversión, y no tenemos que pedir perdón a nadie por ello y está tal cual». Decía el gerente que no puede volverse a abrir Nido de Arte, «acaban de cercenar que el negocio siga como tal y esta montado, estructurado, en función de todo lo que hay dentro, adaptado, con un equipamiento musical y no se puede transformar ahora un taller de motos, no está hecho para eso, porque entonces las pérdidas, el daño económico que nos infringe el Ayuntamiento, son horribles, esto es el segundo club de jazz de toda España en orden de antigüedad, después del Jamboree. Una empresa no es una licencia, eso es un papel, esto es una empresa, y espero que no se malogre».

Germán Navarro confirmó que fue una circunstancia «sorpresiva,  de pronto nos enteramos que el Ayuntamiento está actuando caciquilmente sobre determinadas demarcaciones y locales porque cree que con esto está reduciendo  el ruido medio ambiental", añadiendo que «el Ayuntamiento ha creado los nuevos hombres de negro, cazaterroristas; esos terroristas, evidentemente somos nosotros y nos tiran a escopetazos, vivimos como liebres por el monte, esto es así. Los hombres de negro son las gente del Ayuntamiento, Urbanismo, y los departamentos que están detrás de nosotros y quiero comentar que los hombres de negro son inmisericordes, te hacen saber, con total desparpajo que van a actuar como talibanes y lo que todavía es peor, minan tu moral de defensa, calificando tu empresa como chiringuito, esto significa exactamente que yo he estado, de departamento en departamento,  rastreando la zona jurídica de Urbanismo y la enfermedad es esta, que nos dicen que vienen como talibanes, y me pregunto por qué, y que digan que están por cargarse chiringuitos. No tengo la Seat aquí, pero con todos los respetos, es mi empresa, es la inversión de toda mi vida».