Como estaba previsto, Carlos Indiano llegó ayer a un acuerdo para su rescisión de contrato con el Albacete Balompié. El jugador se entrenó aparte, compareció en sala de prensa y después invitó a comer a toda la plantilla y cuerpo técnico. Por la tarde firmó su contrato con el Hércules y fue presentado en la capital alicantina, donde coincidirá con varios ex del Albacete, como Adriá Granell o Paco Peña.

Indiano deseó la salvación para el Albacete y resaltó que «el Albacete merece estar en Segunda, para eso vinimos aquí, para devolver al equipo a esta categoría y yo me voy dejándolo en Segunda. Espero que al final de temporada siga en la misma categoría y nos podamos encontrar por el camino».

El centrocampista madrileño aseguro que «es un hasta pronto, porque tengo la sensación de que algún día volveré, o esa es mi intención, porque es el sitio en el que más a gusto me he sentido futbolisticamente hablando y tengo mucho que agradecer tanto a la afición, como a los compañeros y al club en general por el trato que se me ha dado, aunque es una lástima la forma de salir».

Sobre las causas de su marcha y si esperaba haber tenido más oportunidades, ya que apenas jugó 200 minutos en liga y los partidos de Copa, dijo que «el trabajo lo he hecho igual siempre. He tratado de hacerlo lo mejor posible. Si tengo el reconocimiento de compañeros y gran parte de la afición que acude al estadio cada fin de semana algo tendré que haber hecho bien. Me voy con la cabeza bien alta y la sensación de haberlo hecho lo mejor posible».

«No me voy con ningún rencor. En otro momento sí que se ha contado conmigo y he sido muy útil para esa persona que a lo mejor ahora mismo no me ha dado esos minutos y decide prescindir de mí. Yo soy el primer sorprendido por muchas cosas. El año pasado disputo 37 partidos pero en el partido más importante del año no entré como titular. Durante este año vinieron muchos fichajes para el centro del campo. Son cosas que analizas y comentas en tu entorno porque hay cosas que no ver normales. Por suerte tenía otro año de renovación automática, continué  y he jugado 200 y pico minutos, además de los partidos de Copa del Rey y los análisis las tenéis que sacar vosotros. No ha habido ningún problema con el entrenador, en ningún momento. No he tenido ningún tipo de trifulca, enfrentamiento, malas caras, lo puedo decir claro. Cuando el míster me lo comunicó siempre habló que era un tema deportivo, nada extradeportivo».

Para terminar comentó que «siempre he dicho y diré  que este vestuario, este grupo de personas, es increíble. Nos hemos caracterizado siempre por ser gente muy honrada y muy humilde y ante todo estoy agradecido y sólo tengo palabras buenas para el Albacete».