El ámbito cultural de El Corte Inglés de la Avenida de España acogió la presentación del libro Ser inteligente no es un delito, de Álvaro Cabo Ciudad, jovencísimo blogger que con 11 años es creador el blog Mi país a través de mis ojos, que tiene más de 100.000 seguidores. Álvaro Cabo estuvo acompañado en esta presentación literaria y firma de libros por la periodista Sonia González.

El joven, que estudia sexto de Primaria en Sagrado Corazón de Talavera de la Reina, comentó a La Tribuna de Albacete que «Mi país a través de mis ojos nació a raíz de una visita que siempre califico de agridulce a la Biblioteca Nacional de España, en Madrid, ya que por las circunstancias de ser menor de edad no me dejaron sacarme el carnet y no pude acceder a sus fondos. Además en el libro Ser inteligente no es un delito, explico algunas frustraciones que me han ocurrido a la largo de mi vida; el aburrimiento que he pasado y que  pasa, en la mayoría de los casos de altas capacidades, como es la mía,  tanto en el colegio, como en el  trabajo o en la familia».

Decía Álvaro Cabo que «es curioso que en la  Biblioteca Nacional no pueda acceder a sus fondos y en la Biblioteca Nacional de Túnez estuve dando una conferencia y pude dejar allí mi libro y acceder a esos fondos. También la Fundación Botín quería que diese una charla y no pude porque los menores no pueden pisar un campo universitario».

Álvaro Cabo pensó que sus frustraciones tenía que comunicárselas al mundo por medio de internet y la escritura y «comencé con mi blog  y un libro con otras ideas, para que llegue a más personas y salió en noviembre, con varios objetivos y recámaras, podría decirse. En primer lugar, para llegar a todos los niños, jóvenes y adultos que han padecido la incomprensión en las aulas, sólo por tener una inteligencia superior a la normal y ojalá que los profesores presionen al sistema educativo  para que cambie y los puedan formar, como ocurre en otros países, como Finlandia o Estados Unidos, para saber cómo deben tratar con las altas capacidades».

superdotado. Reconocía Álvaro Cabo que no le gusta la palabra superdotado «porque se emplea como algo despectivo, algo malo y además se dice que te diagnostican de altas capacidades y diagnóstico es solamente para decirte que estás enfermo, pienso».

Hay recomendaciones en este libro y como castellano-manchego, decía Álvaro Cabo, «con la ayuda del bog y el libro he podido ponerme en contacto con el consejero de Educación, Marcial Marín,  y cuando fui a Túnez me dio personalmente unos Quijotes para que los llevase a la Biblioteca y ahí están», decía.

Propone Álvaro Cabo que «no se nos corten las alas, porque muchas personas no pueden explotar su talento y sin duda ese talento no sirve para nada si no se explota y si  no te dejan explotarlo, pero reivindico que la administración empiece a formar bien a los profesores  y que no se nos discrimine por tener una inteligencia superior al resto y también hablo en mi libro del espíritu emprendedor y  de superación». El joven, que quiere dedicarse a la Neurocirugía  y se fija en Ramón y Cajal, tiene un su blog un post dedicado a Mis pautas para salir de la crisis.