Nunca imaginé que la vida del famoso fuera tan dura. Llegas a un sitio, a veces desconocido para ti, y un montón de fotógrafos y camarógrafos empiezan a darte voces para que mires para un lado, para el otro, hables con ellos, discutan entre ellos, y ocurran un montón de cosas ajenas a tu persona. Muchos hacen lo que se llama un barrido de dientes, es decir, sonríen y van girando la cabecita de un lado a otro. Deberían en estos photocall colgar un cartel que dijera: «está prohibido dar de comer a los famosos». Menos mal, criaturicas, que este trabajo está, en principio, bien remunerado.

En el Circuito del Jarama de Madrid, que parece anclado en el tiempo pues no percibo ninguna mejora en años en sus instalaciones, tuvo lugar la presentación de un pepino volador para que nuestros jóvenes puedan emular a los pilotos de rallys por las calles de las capitales de provincia. Se trata del Peugeot 208 GTI 30 aniversario, con el que la marca del león conmemora uno de los coches más vendidos en los 80 en nuestro país: el 205 GTI. El actual es un juguetito, lo pude probar en circuito, que se mete en las curvas como el AVE, alicatado hasta el techo y con seis marchas para que la DGT y el Consejo de Estado disfruten con nuestra conducción. 

En los boxes, junto a las setas, que en invierno no te quitan el frío y en verano te achicharras de calor, fueron desfilando los padrinos de este evento para prensa de motor y lifestyle. Jesús Castro, flamante fichaje de la segunda temporada de la serie El Príncipe y candidato a conseguir el Goya a actor revelación por El Niño, apareció en escena con un mono blanco y unos zapatones negros que parecía de todo menos de piloto. De lejos, el Papa Francisco, de cerca un pintor a pistola. 

Cuando se montó en el coche para comenzar a pilotar se nos cayó el mito, y hasta en tres ocasiones éste se le caló y su compañero de oficio, Fernando Guillén, tuvo que echar marcha atrás para no dejarle en evidencia. Guillén, aficionado a los vehículos y con unos elegantes botines de cuero marrón, optó por el 205 clásico de rallys, que es más propio de su edad. Hijo y hermano de leyendas, cosecha éxitos teatrales junto a su novia Ana Milán (la rabiosa de Cámera Café) con la obra El diario de Adán y Eva. Todo esto ocurría ante la atenta mirada de Álex Rins, piloto español de Campeonato del Mundo de Motociclismo, que les sugería por lo bajini que igual no era lo más apropiado comenzar la carrera bajo el puente de Hyundai, por eso del posicionamiento de la marca en cuestión. 

Tengo que decir en honor a la verdad que todos estuvieron muy simpáticos y, aunque amenazaron con atropellar en la salida a los fotógrafos presentes, todo quedó en una humorada. Los compañeros, por si acaso, procedieron a quitarse de la pole position. 

Una de las presentadoras del momento, y qué presentadora, también anduvo haciendo sus pinitos por allí. Les hablo de Lara Álvarez, sustituta de Edurne en el espacio Todo va Bien de Cuatro y a la que a algunos malévolos les gusta comparar su carrera con la de Sara Carbonero. Ambas son jóvenes periodistas, Lara tiene 28 años, y las dos mantienen relaciones con grandes deportistas. Álvarez afirma estar en uno de los mejores momentos de su vida junto al piloto de Fórmula Uno, Fernando Alonso, que es asturiano como ella. Así, no quiso perderse el teatrillo de la carrera entre actores y dar el banderazo de salida, literal, que hubo de repetirse varias veces por lo acontecido y antes narrado en esta crónica.

Con unos leggins que realzaban su espléndida figura, se marchó rauda y veloz al calor de las setas, pues en medio del circuito corría el peligro de quedarse pajarica.

Compañeras del corazón como Beatriz Cortázar o Paloma Barrientos le preguntaban si conocía a la Reina Letizia. «Pues no», aseveró. «Pero si es asturiana como tú», insistían, «ya, pero no», afirmó. Oye, por cierto, la Soberana ha ayudado al flamante Monarca a hablar en público con más soltura. ¿Harás tú lo mismo con tu novio? Respuesta: «somos personas públicas y cada uno sabe lo que tiene que decir». En la prensa rosa, en la que hay tantas chicas como homosexuales, todos pugnaban por captar la atención del entrevistado hasta el punto de decirse unos a otras, «¿que tal si le dejas contestar a la invitada?»

En fin, la sangre no llegó al río y para pastorear a toda esta trupé estuvo el director de comunicación de Peugeot España, José María León, que acompañado por la comunicadora de moda y consultora de lifestyle, María León, no confundir con la actriz, fueron los asistentes más discretos. Otro día les explico lo que hace una consultora de lifestyle, que tengo que llamar a USA a preguntar por ello.