El Museo Municipal de Albacete acogió la inauguración de la exposición de la XI Bienal de Artes Plásticas Ciudad de Albacete, en un sencillo acto presidido por la alcaldesa, Carmen Bayod.

La muestra es una cita obligada para todos aquellos que disfrutan con la pintura, por la calidad de las 66 obras seleccionadas, valoradas por el jurado de lujo, compuesto por Julio López Hernández, Antonio López García, Guillermo Solana Díez, Godofredo Giménez, Miguel Ángel Santos Martínez y Luis Mayo Vega.

La exposición recoge las 66 piezas seleccionadas entre las 303 que concurrieron, entre ellas el primer premio, otorgado por unanimidad a Íñigo Navarro Dávila, con Funcionarios de la Generalitat representando el saqueo de Bizancio el día de la Diada. También ahí están las obras adquiridas a Tamio Goto, con Tres meses de Yannan; Emilio González Sainz, con Luces de marzo, y Carlos Madrigal Neira, que concurrió con Matrimonio.

Manuel Serrano, concejal de Cultura, dio a todos la bienvenida al Museo Municipal, «corazón de la cultura» y valoró el trabajo del jurado y los técnicos municipales que hacen posible esta XI Bienal que se podrá visitar hasta el 28 de septiembre.

Por su parte, la alcaldesa de Albacete, que entregó el premio a Íñigo Navarro, agradeció la participación de los más de 300 artistas que se presentaron a «esta  Bienal de prestigio y con carácter decano, porque desde 1986 Albacete está presente en la agenda cultural de nuestro país».

Recordó Carmen Bayod la procedencia de los artistas, «este año un 20 por ciento paisanos, presentes en la selección final, con obras muy interesantes, y otro 10 por ciento, pintores de tierras lejanas, como la adquisición de una obra de gran belleza firmada por un creador japonés».

La Bienal recordó Bayod, «para nuestra ciudad supone vivir en primera persona las tendencias pictóricas que se están produciendo en el país, con los cambios que se llevan a cabo en la pintura».

PATRIMONIO. Subrayó el trabajo del jurado, «por cumplir con su difícil misión de selección y por ofrecernos una muestra tan sugerente y enriquecedora» y felicitó al ganadores y pintores cuya obra ha sido adquirida en esta edición, «por sus obras que van a pasar a formar parte de nuestra colección, que reafirman la línea artística del importante patrimonio albacetense, una colección que gira entorno al realismo y figuración y que también recoge otras corrientes presentes». Felicitó a Manuel Serrano y todo su equipo de colaboradores y no olvidó una mención especial para Fundación Caja Rural de Albacete, Globalcaja.

El ganador, Íñigo Navarro, tras recoger el premio, dotado con 10.000 euros, de manos de la alcaldesa, resaltó que «con respecto a Albacete decir que aquí, hace cuatro años estuve en un taller con Antonio López, donde algo me pasó con respecto a mi arte y cuatro años después me dan el premio en la Bienal. No me voy a poder olvidar nunca de Albacete».

EMOCIÓN. El presidente de la Fundación Caja Rural de Albacete Globalcaja, Higinio Olivares, reconoció que «en esta vida hay momentos cargados de emoción, como éste de inauguración de la Bienal y es que esta selección entre las más de 300 presentadas hablan del difícil y  gran trabajo del jurado y a partir de hoy el público podrá disfrutar de ese gran trabajo que ha hecho el jurado, en esta Bienal, una de las más esperadas  del panorama cultural español, cuyo prestigio ya trasciende fuera de nuestras fronteras».

Antonio López, en nombre del jurado, valoró el trabajo de los componentes del jurado; «labor difícil porque en el camino se quedaron casi 300 obras y lo sentimos muchísimo, aseguro que es una frustración, porque no es posible medir los valores de los artistas. Enhorabuena  a todos y a los que han resultado ganadores, a las adquisiciones y además hay dos o tres obras a las que me siento muy cercano. A los que se sientan defraudados por el trabajo que hemos hecho, les pido humildemente disculpas», terminó.

Por su parte, Guillermo Solana, jurado y director artístico del Museo Thyssen de Madrid, dijo que «en los últimos años un habitual de las Bienales y por esto estoy muy agradecido a la ciudad de Albacete y su Ayuntamiento. En los últimos años he venido como una especie de acompañante titular de Antonio López y he discutido con él y he aprendido muchas cosas aquí, viendo pintura con él, porque hay pintura y fotografía tan variada, que es una oportunidad estupenda, porque a mí, imagino que como ustedes, me interesa mucho la opinión de Antonio y mi conclusión es que el jurado no ha sido dogmático ni partidista y nos dolería que alguno que no está presente en la selección pensara que esto significa cualquier clase de menosprecio por parte del jurado, porque había pintura muy buena que no ha podido ser colgada finalmente».

Sólo falta acercarse a este gran escaparate artístico, la XI Bienal.