La Junta de Comunidades acaba de sacar a exposición pública por un mes los planes de gestión de hasta 33 espacios protegidos de toda la región, bajo la figura de Ligar de Importancia Comunitaria o LIC, de los que cinco corresponden a la provincia de Albacete.
En concreto, estos espacios son los encinares y pastizales de La Encantada, El Moral y los Torreones; las Lagunas del Arquillo, Laguna de los Ojos de Villaverde, Lagunas Saladas de Pétrola y Salobrejo, el Complejo Lagunar de Corral Rubio y la Sierra de Abenuj.
Estos espacios protegidos suman más de 5.000 hectáreas, que se reparten entre una docena de ayuntamientos, que son los de Villarrobledo, El Bonillo, Ossa de Montiel, Masegoso, Peñascosa, Robledo, Alcaraz, Tobarra, Pétrola Corral Rubio, Chinchilla de Montearagón e Higueruela.
Además, en paralelo, la Adminstración autonómica ha abierto otro plazo, también de un mes de duración, por el que se abre un trámite de audiencia para que las asociaciones e instituciones que se consideren afectadas por estos planes de gestión puedan personarse en el proceso de tramitación de estos expedientes.
Esta medida ya fue anunciada, a principios de mes, por la presidenta de la comunidad autónoma, María Dolores Cospedal, quien afirmó que, a fecha de hoy, de los cerca de 109 espacios protegidos declarados como tales por la Junta, la gran mayoría carecían de planes de gestión. El objeto de estos planes, en palabras de la presidenta, no solo es protegerlos, «sino regular sus distintos usos y aplicaciones, además de declararlos como Zonas de Especial Conservación».
Los Lugares de Importancia Comunitaria o LICson hábitats que se designan como tales porque, por su biodiversidad o su situación, son clave para la conservación de la biodiversidad en el continente europeo. La declaración como LIC s realiza en virtud de estudios científicos que avalen dicha declaración, y es un paso previo a la declaración como Zonas de Especial Conservación o ZEC.
Una vez concluida la declaración como ZEC, estos espacios entran a forma parte de la Red Natura 2000. La creación de esta red, en España y en Castilla-la Mancha, acumulaba un considerable retraso, pues las declaraciones debían estar listas y vigentes en 2004.