La consejera de Agricultura, María Luisa Soriano, manifestaba ayer su «preocupación» por el veto de Rusia a algunos productos agroalimentarios, porque si bien ha insistido en que sólo afecta al 0,6 por ciento de las exportaciones agroalimentarias, fundamentalmente de cárnicos y frutas y hortalizas, el Gobierno regional quiere defender los intereses de los productores que se puedan ver perjudicados.

Soriano, que hacía estas manifestaciones en Bolaños de Calatrava, (Ciudad Real), donde inauguraba el Hotel Rural Doña Berenguela, rehabilitado con fondos del programa LEADER, señalaba que desde la Consejería de Agricultura se está manteniendo un diálogo constante con el sector, así como con el Ministerio de Agricultura, con el que se comparte la necesidad de que la UE active de manera inmediata mecanismos de compensación, tal y como ayer solicitaba España a la Comisión Europea, informaba la Junta de Comunidades en nota de prensa.

En este sentido, en Bruselas ayer se acordaba la propuesta, por parte de la Comisión Europea, de ayudas para determinadas verduras perecederas como los pepinos y los tomates que se encuentran en dificultad tras el veto ruso a las exportaciones agroalimentarias procedentes de la UE con el objetivo de estabilizar los mercados.

Una medida que será presentada la próxima semana, según adelantaba ayer el comisario de Agricultura, Dacian Ciolos.