Sinopsis oficial
1945, Leningrado. La Segunda Guerra Mundial ha devastado la zona, demoliendo sus edificios y las vidas de sus habitantes. Dos mujeres jóvenes, Iya y Masha, lucharán por reconstruir sus vidas en una ciudad en ruinas.
La crítica -
Por Juana Samanes
Hace dos años, el joven director ruso Kantemir Balagov, de tan solo 26 años, sorprendía con su primera película, Demasiado cerca (Tesnota) donde retrataba la Rusia postperestroika, donde los secuestros-express estaban a la orden del día. Ahora ha vuelto los ojos hacia las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial para narrar el intento de supervivencia de dos mujeres exsoldados, en una sociedad en ruinas donde comer todos los días resulta muy difícil.
Brutal de principio a fin, y sórdida en muchas secuencias, la instantánea que hace de las dos muchachas tras esa guerra que las ha devastado no puede ser más aterradora: la una, la “larguirucha”, tras ser herida en la cabeza, suele "congelarse"” en algunos momentos y, la otra, se ha quedado estéril, pero vive obsesionada con ser madre tras morir el pequeño hijo que tenía. Para la segunda los hombres son meras comparsas para salir adelante.
La pobreza física se traduce, en esta ocasión, en falta de moralidad. Todo ello provoca una sensación desasosegante que el autor quiere salvar alabando una amistad bastante singular.
Funciona como crítica antibélica, pero por su dureza no es apta para demasiados paladares.