El portavoz del PPen las Cortes, Francisco Cañizares, aseguró en relación a las propuestas presentadas por el PSOE sobre empleo que «García-Page pretende reeditar las políticas de Barreda que dispararon el paro y pusieron la región al borde de la quiebra». A juicio del dirigente popular, este plan «que podría ser llamado el Plan Barreda, no deja de ser una vuelta a las andadas y a todo aquello que llevó a Castilla-La Mancha a ocupar los primeros puestos en cuanto a deuda y crecimiento del paro», Según Cañizares, los socialistas quieren «reeditar las políticas que han ocasionado el destrozo económico, financiero y social de la región puestas en marcha por un Gobierno, del que formó parte como vicepresidente, y que señalaron a la región como la más incumplidora del país».
Asimismo, subrayó que Castilla-La Mancha está pasando por una situación complicada debido a la crisis y «a que hemos tenido los peores gestores posibles, los mismos que ahora son incapaces de llegar a acuerdos con el PP y que presumen de su acción de gobierno de los últimos años». A su entender, estos políticos «son los que sobran en la política regional y los que están desacreditando a un PSOE que necesita cuanto antes un cambio de rumbo y de caras si quiere representar a la sociedad castellano-manchega».
«Las políticas de los que nos han traído hasta aquí no van a ser nunca la solución para salir de esta grave situación», aseveró para indicar a continuación que «la gente lo sabe y da la espalda tanto a los responsables del paro en la región como a los que ampararon la gestión de un partido que causó el 80% de los desempleados de este país». Dijo que así se pudo ver en las manifestaciones del Día del Trabajo: «No tienen argumentos distintos a los que nos han traído a esta situación».
Un remake de 2009.
Quizá el caso más claro es la propuesta de Plan de Choque que ayer hizo Page para contratar a 30.000 parados sin prestación durante 6 meses. La medida recuerda mucho al Plan de Choque que ya activó Barreda en 2009, que también iba dirigido a parados que no cobraban ninguna prestación y que subvencionaba principalmente a los ayuntamientos para que contratasen de forma temporal a desempleados
Ya cuando estaba en la oposición, el PP criticó la puesta en marcha de esta medida y no quiso apoyarla en la firma del Pacto por Castilla-La Mancha. Entonces denunciaron que ese plan no resolvía el problema del fondo del empleo. Después, cuando entraron en el Gobierno recordaron que además se dejó parte sin pagar. En concreto 13,1 millones de los años 2009 y 2010, a los que hay que sumar otras deudas con los ayuntamientos de 41,2 millones de Desarrollo Local y otros 40 de la Acción Local y Autonómica.