Con un incremento generalizado en todas las tipologías de delitos, la cifra total de infracciones penales aumentó algo más del 30% en la provincia de Albacete durante 2022, en comparación al año anterior, y se sitúa en registros superiores a los previos a la pandemia.
Así se desprende del balance anual de criminalidad publicado por el Ministerio del Interior, con datos aún por consolidar del último trimestre de 2022. Ese documento cifra en 15.370 las infracciones penales registradas en la provincia de Albacete durante 2022, lo que supone un incremento del 30,5% con respecto a las 11.777 de 2021 y del 17,3% más que en 2019, último año completo antes de la crisis sanitaria por el Covid-19, cuando fueron 13.105.
El aumento provincial queda, por tanto, por encima de los registrados en Castilla-La Mancha, un 20,1% anual con un total de 70.308 infracciones, y a nivel nacional, del 18,8% y 2.325.358.
Dentro de esos números, vuelve a destacar el aumento de la cibercriminalidad (infracciones penales cometidas en o por medios cibernéticos), con 3.348 delitos notificados, un 34,3% más que el año anterior, cuando fueron 2.492, y destacado incremento del 71,7% con respecto a 2019 (1.950). Casi el 90% de los registrados (3.005) fueron estafas informáticas, mientras que el resto quedaban encuadradas en otros tipos de ciberdelitos.
Más allá del aumento de homicidios dolosos y asesinatos consumados (del 100%, al pasar de uno a dos, ambos en la capital provincial), el principal incremento porcentual se registra en las violaciones (agresiones sexuales con penetración). Estas ascendieron a 22, un 69,2% más que en 2021, cuando se contabilizaron 13, y un 120% con respecto a las 10 de 2019. Mientras, en el resto de delitos contra la libertad sexual se dio un leve descenso anual del 6% (de 98 a 92).
En cuanto a otros tipos de infracciones, los delitos contra el patrimonio siguen siendo el tipo más numeroso, a excepción del epígrafe que Interior denomina resto de criminalidad convencional (con 6.871 posibles delitos, un 21,5% más que en 2021).
Mientras, robos y hurtos de distintas clases suman 5.335, un 46% del total de las infracciones registradas en 2022. En la comparación con 2021 suben todos sus tipos: con violencia e intimidación (206, un 17% más); con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (722 y 29,2%); hurtos (3.708 y 49,4%); y sustracciones de vehículos (137 y 41,2%). En cualquier caso, cabe resaltar que los dos primeros de ellos descienden en relación a 2019 (con bajadas del 18,3% y 23,1% respectivamente).
Del resto de infracciones, crecen también notablemente los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria (165, un 46% más que en 2021 y 6,5% que en 2019). Menos lo hacen las infracciones por tráfico de drogas (un 10,4% hasta situarse en 85), mientras que la provincia no registró ningún caso de secuestro en los tres años mencionados.
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