Las gasolineras de la provincia de Albacete están en pie de guerra por la imposibilidad de poder cumplir a rajatabla el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno, que les obliga a descontar desde ayer a todos los consumidores 0,20 céntimos por cada litro de carburante que echen en los depósitos de sus vehículos.

Esta bajada del precio de los carburantes ocasionó por un lado colas en algunas estaciones de servicio para repostar, ya que muchos conductores se reservaron buscando el ahorro, y en otras gasolineras  los equipos informáticos no funcionaban al no haber tenido tiempo de adaptarlos a esta realidad.

Una situación que, con un escaso margen de tres días, según informó Ignacio Sotos, vicepresidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Estaciones de Servicios de Albacete, integrada en FEDA, obligaba a las estaciones de servicio a transformar sus equipos informáticos a la nueva realidad, «adaptación que hoy está provocando un gran caos, ya que hay compañeros que han podido modificar los sistemas informáticos de sus estaciones de servicio, otros que están en ello, otros a los que el sistema se les ha bloqueado y los hay que incluso que están realizando las anotaciones a lápiz y papel, y mientras tanto dando dinero de su bolsillo», apuntó.

Sotos consideró que «este embrollo no era necesario, por el simple afán recaudatorio del Gobierno en esta cuestión, al que no le interesa en absoluto bajar los precios».

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