El tenista español Rafa Nadal debutó con una agónica victoria (6-2, 1-6, 7-6(3)) ante el estadounidense Sebastian Korda este sábado en el torneo de Indian Wells, primer Masters 1.000 de la temporada, mientras que Carlos Alcaraz y Roberto Bautista se citaron en tercera ronda tras sendos estrenos triunfales.

El hombre a batir de 2022, un Nadal que puso el 16-0 en su temporada, salvó una gran trampa en su inicio de la cita californiana y en tercera ronda se medirá con el británico Daniel Evans. Korda peleó contra el campeón de 21 'grandes' y consigo mismo, en la presión de inicio y cuando vio que podía ganar.

El americano, de 21 años, entró fallando un montón de pelotas y el balear se puso 4-0 en un momento. Nadal empezó a sentir el buen juego al resto de su rival, pero salvó dos bolas de 'break' y sin mucha oposición se apuntó la manga (6-2). Le faltaba mandar con su derecha a un Nadal que volvió benévolo al segundo acto.

El de Manacor regaló un par de golpes y Korda aprovechó la puerta abierta para un 'break' de mucha confianza. El cortocircuito del tres veces campeón ya en 2022, Melbourne, Australia y Acapulco, duró más de lo esperado y se llevó un duro 1-6. El jugador local, ante su ídolo, se creció en el peloteo y recordó que jugaba en casa.

El estreno subió de nivel, la adaptación a la pista dura no daba respiro y Nadal descarriló hasta verse 2-5 abajo. Korda sacó dos veces para ganar al invicto del año, al de los 21 'grandes' tras remontar dos sets a Medvedev, pero el balear se enchufó a tiempo de otra épica remontada y a Korda le pudo el momento hasta terminar de hincar la rodilla en el 'tie-break'.

Bautista-Alcaraz, duelo español en tercera ronda

Otro español en racha y con muchos focos, Alcaraz celebró su primera victoria en Indian Wells al superar (6-3, 6-3) al estadounidense Mackenzie McDonald. El murciano, de 18 años, entró fuerte con la convicción de un 'Top 20' del mundo y firmó el 9-1 en 2022, ganador de sus últimos siete partidos.

El reciente campeón en Río de Janeiro mandó con su derecha después de un primer intercambio de 'breaks'. Tras apuntarse el primer set, el español bajó con su saque. El tenista americano hizo dudar a un Alcaraz que terminó cediendo su servicio en el quinto juego. McDonald no consolidó su trabajada ventaja y el español volvió con más fuerza para encadenar cuatro juegos seguidos.

Alcaraz buscará su segundo triunfo en el desierto californiano ante su compatriota Bautista. El castellonense superó (6-3, 6-7(3), 7-6(5) al estadounidense Jeffrey John Wolf en un cardiaco estreno en Indian Wells. Bautista parecía encarrilar su triunfo con el primer set y un 3-0 en el segundo, pero el jugador local se vino arriba.

El español no pudo evitar el tercer set y, con opciones para ambos, Wolf sacó para ganar el partido, pero Bautista salvó dos bolas de eliminación, rompió el saque y forzó un 'tie-break' en el que impuso su ley tras más de tres horas para citarse con Alcaraz.

Badosa arranca con buen pie

En el circuito femenino, Paula Badosa arrancó con buen pie la defensa del título conquistado el año pasado, al imponerse por 6-2 y 7-6(4) a la checa Tereza Martincova, número 42.

En el torneo en el que hizo historia el año pasado, al arrancar lejos de las favoritas hasta coronarse campeona, Badosa regresó a la pista central con una actuación sólida y triunfó en una hora y 37 minutos.

La jugadora española, de 24 años, solventó de forma positiva un debut exigente, ante una rival a la que nunca había ganado en tres precedentes, sin poder ni siquiera quitarle un set.

También triunfó Sara Sorribes (n.36), quien remontó y doblegó en dos horas y 32 minutos a la esloveno Kaja Juman, por 3-6, 7-5 y 6-3.

La sorpresa la dio la italiana Jasmine Paolini, número 46 del ránking WTA, que doblegó a la segunda favorita, la bielorrusa Aryna Sabalenka.

En la noche californiana del sábado, la japonesa Naomi Osaka cayó 6-0 y 6-4 ante la rusa Veronika Kudermetova.

Osaka estuvo condicionada al comienzo del encuentro por los gritos de un aficionado desde la grada, por los que que se quejó repetidamente con la jueza, hasta llegar a estar al borde de las lágrimas.