Hoy se cumple una semana desde que el matador de toros Pedro Marín finalizase la huelga de hambre que le mantuvo durante 10 días en la puerta de la plaza de toros de Albacete, reivindicando poder presentares como matador de toros en la plaza de su tierra, lo que no se había producido durante los ocho años que han transcurrido desde que tomó la alternativa el 15 de agosto de 2011 en la plaza de toros de Tobarra.

El torero albacetense ha quedado muy mermado de fuerza física, por lo que su recuperación está siendo lenta, aunque satisfactoria, ya que las secuelas que puede dejar al mantenerse una decena de días sin ingerir alimento, solo con suero y glucosa, requiere de un régimen de comidas muy cuidadoso y poco a poco ir recuperando el tono muscular y las fuerzas.

El propio torero ha manifestado a La Tribuna de Albacete que desde el día que cesó la huelga de hambre, ha tenido que ir comiendo muy poco a poco y los primeros días, solo con una dieta blanda, ya que el estómago no se encontraba preparado para recibir una alimentación normal, lo que ha realizado bajo la prescripción médica.

Marín ha señalado que ya va haciendo comidas normales en desayuno, comida y cena, aunque poca cantidad, debiendo de hacer otras comidas más frugales cada hora y media, para que el cuerpo pueda acostumbrarse de nuevo a la ingestión de sólidos.

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