La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) estudia la puesta en marcha de los pozos de sequía situados en el acuífero Mingogil-Villarones, cuyo territorio comparten los términos municipales de Ayna, Elche de la Sierra, Hellín y Liétor, en la provincia de Albacete.

Con tal propósito, el organismo de cuenca sacaba recientemente a licitación el contrato de la asistencia técnica para la elaboración y tramitación de la evaluación de impacto ambiental de la puesta en explotación temporal de los pozos de sequía «en el marco de una declaración de situación de sequía en la Demarcación Hidrográfica».

Este contrato se pone en marcha justo cuando la situación de la cuenca del Segura acaba de experimentar una considerable mejora, debido a una primavera excepcionalmente húmeda que, en el mes de abril, trajo precipitaciones que  oscilaron entre el 150% y el 300% de la media para dicho mes, de acuerdo a los últimos datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorológica (Aemet).

La principal consecuencia de este abril «muy húmedo» en la Demarcación es que de las cuatro grandes áreas en las que ésta se divide, tres se encuentran en situación de «normalidad». Se trata de las UTE denominadas Cabecera, Ríos de la Margen Izquierda y Ríos de la Margen Derecha. Las dos primeras, por cierto, coinciden con la parte albacetense de la cuenca. La única zona que aún sigue en situación «prealerta» es la UTE Principal, que coincide con la parte baja de la cuenca.

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