Cruz Roja colabora en la vigilancia forestal de La Manchuela

Redacción
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Voluntarios de las asambleas locales de Casas Ibáñez, Mahora y Villamalea participan en tareas como detección de fuegos, seguimiento de tormentas secas o información a los usuarios del monte

Cruz Roja colabora en la vigilancia forestal de La Manchuela - Foto: Cruz Roja

Cruz Roja Albacete, a través de sus Asambleas Locales, da inicio a un proyecto de vigilancia preventiva contra incendios forestales, único en toda Castill-La Mancha, según indica una nota de prensa.

Gracias a la participación de voluntarios y voluntarias de las asambleas de Casas Ibáñez, Mahora y Villamalea, los entornos naturales de las Riberas del Júcar y del Valle del Cabriel se ven más seguros que nunca.

El voluntariado de prevención de incendios forestales de Cruz Roja en la Manchuela, tiene como principal labor el colaborar con el resto de agencias participantes en la detección de incendios forestales mediante labores tan sencillas como son la detección  de incendios incipientes, seguimiento de tormentas secas, sensibilización a los usuarios del monte, vigilancia disuasoria contra actividades incívicas en el monte, asesoramiento a los paisanos y agricultores en sus labores diarias como la siega del cereal, colaborar en otro tipo de actividades como son búsqueda de personas extraviadas o atención sanitara  inicial a  participantes en las labores de extinción. 

Este año y debido a la ola de calor y a las tormentas secas sufridas en el episodio del 10 al 19 de junio, Cruz Roja adelanta dos semanas el inicio de la campaña dando comienzo el día 14 de junio de 2022. 

La prevención de incendios forestales es una de las actividades más destacadas durante la campaña de verano, tanto por el alto riesgo en la época estival, como por la aceptación de dicha actividad por parte de la población de los diferentes municipios, que quiere sentirse más partícipe en las labores que cuidan de su medio natural.

Si algo es destacable en este proyecto es que no sólo es necesaria la colaboración de personas jóvenes para los días de mayor riesgo de incendio, sino que nuestros  voluntarios y voluntarias más seniors junto a las asociaciones que disfrutan de actividades en el medio natural, son imprescindibles durante el resto del año para enseñar la orografía,  el acceso a los sitios más recónditos de los bosques, los puntos de carga de agua, las fuentes, e incluso a quién pertenecen la multitud de casas y huertas del entorno.