Manuel Caballero: «Estoy contento, fue el día más importante»

Pedro Belmonte
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El novillero albacetense consiguió un destacado triunfo en la plaza de toros de la capital y afirmó que «para mí sería un orgullo poder torear en la Feria»

Manuel Caballero en la corrida de Asprona. - Foto: Rubén Serrallé

El pasado domingo, el novillero Manuel Caballero consiguió un importante triunfo en la plaza de Albacete, en uno de los festejos más emblemáticos del año, la corrida de Asprona, que en esta edición cumplía el medio siglo de existencia. Los aficionados pudieron ver a un joven con muchos recursos y un gran concepto del toreo, cortándole las dos orejas al segundo novillo de su lote, proclamándose triunfador de la tarde. Con el reposo que concede los días que han pasado desde entonces, hemos charlado con el joven novillero quien nos ha trasladado sus impresiones, como transcurrió la tarde y sus sensaciones en un día tan importante.

«Estoy muy contento, ya que, hasta este momento, ha sido el día más importante de mi vida y he tenido la suerte de sacarlo lo mejor posible. Había los nervios lógicos de una tarde como esta, ya que era una apuesta fuerte, la plaza de Albacete y los compañeros que tenía, que no hay que olvidar que eran dos figuras del toreo, pero además de los nervios había mucha ilusión y confianza en mí mismo y así creo que lo demostré». 

Los días señalados se pasan de forma particular. «Estuve muy tranquilo todo el día, incluso te diría que toda la semana estuve tranquilo. Estuve con mi padre la semana entera y el día de la corrida estuve el día entero en el hotel, comí con la cuadrilla entera y después me subí a la habitación, pues me gusta estar solo, con mi mozo de espadas y allí estuve muy relajado y mentalizado». Hablamos de los novillos. «Una pena la espada con el primer novillo, porque no fuese una faena rotunda ya que al novillo le faltó algo de fuerza y aunque tuviese mucha clase, al faltarle fuerza, las faenas no son tan rotundas, pero al consentirle, hubo dos tandas buenas al final con la mano derecha y eso subió el volumen de la faena, me tiré a matar y lo pinché. Los dos novillos pedían llevarlos muy cosidos a la muleta y sobre todo que tirases mucho de ellos y depositases confianza en sus embestidas y así rompían hacia delante y te daban embestidas muy profundas».

No podemos dejar atrás el capote. «Ha sido también una sorpresa para mí, ya que nunca he tenido una destreza especial con el capote, pero los novillos lo hicieron muy bien desde el principio y me permitieron expresarme bastante con el capote, lo que me pone muy contento y luego me permití esas largas cordobesas muy de la casa, que mi padre solía hacer con frecuencia y la verdad es que cuando las di, el publico se puso a tope. Es sorprendente que la gente se caliente tanto con esa suerte y eso que solo pegué tres, pero cuando escuché rugir la plaza me sorprendí mucho, ya que hacía viento y me molestaba, pero si pegas cinco o seis pones la plaza boca abajo».

El público estuvo muy entregado con el novillero. «Estuvo la plaza muy cariñosa conmigo. La afición de Albacete me acogió de manera espectacular y yo salí muy mentalizado a entregarme, no solo a no decepcionar sino a dar espectáculo y que vieran la mejor versión de mí a toda esa gente que había pagado su entrada para vernos. La afición de Albacete, cuando ve a los toreros entregados, se rompe de una manera fabulosa».

Siempre se imaginan los días anteriores como saldría un día tan importante. «Los días anteriores le pegué mil vueltas a la tarde. Pensé en todas las variantes que podían suceder, pensé en el triunfo, en el fracaso, en que los dos matadores saliesen en hombros y yo andando, en fin, pensé en todo por lo que iba muy mentalizado para poder superar todos esos obstáculos y situaciones». Teniendo un padre como el suyo, habría alguna charla previa o conversaciones. «No hubo consejos concretos, pero él sabe perfectamente la preparación que llevo y sobre todo me dijo que estuviese tranquilo, que disfrutase y que apretase mucho, que saliese a morder».

Las madres llevan los suyo. «Mi madre lo lleva bien, los nervios lógicos, porque sabe la importancia de la plaza de Albacete para la familia, pero saliendo bien las cosas, está muy contenta». Sigue sin apoderado. «No hay nadie. Todavía no me ha llamado nadie para interesarse por mi carrera, por lo menos a mi teléfono personal, pero te digo que dando golpecillos como el del otro día, va a ser más fácil, pero tienen que ser muchos y continuados».

No tiene fechas nuevas de momento, pero hemos oído que viene a la Feria de Albacete. «Para mí sería un orgullo poder torear en la Feria, ya que después del ambiente que dejé, volver a la plaza y durante la feria, sería estupendo».

Le preguntamos con que ganadería le gustaría, Montealto o Los Chospes, que son las dos que se lidiarán en la feria como novilladas. «La que embista. Las dos ganaderías están demostrando el buen momento por el que atraviesan, por lo que da lo mismo, las dos son buenas».