El presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, participó en el acto de colocación de la primera piedra del polígono industrial Cuesta Blanca, en Tarazona de la Mancha, acompañado, entre otras autoridades, del presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero, y el alcalde de la localidad, Miguel Zamora.

El municipio acogió después de la reunión del Consejo de Gobierno regional, tras el que los tres representantes institucionales mencionados firmaron un protocolo de actuación para continuar con la mejora de la seguridad vial en la carretera CM-220, así como instalar en ese polígono un depósito de sal en ese polígono y que cuenten con un mismo acceso.

Tal y como recordaba Zamora, "el Ayuntamiento llevaba mucho tiempo ahorrando y ahora vamos a reinvertir en crecimiento", aludiendo a los dos millones de euros que destinará a ese polígono, "porque nuestro mayor déficit lo teníamos en el sector industrial y la atracción de inversiones". También destacaba que la infraestructura quedó paralizada en 2011 y "ahora reanudamos un sueño que quedó parado cuando las crisis se gestionaban de otra manera", en alusión al cambio en las reglas fiscales que permiten una mayor inversión de los remanentes municipales.

Zamora también anunció que "hay conversaciones avanzadas" con empresas interesadas en instalarse en la zona, "a las que trabajamos para ponérselo fácil, con bonificaciones por creación de empleo"