De las decenas y decenas de hitos estadísticos que intoxican la esencia del deporte, algunos son irrefutables: más goles, más paradas, más victorias, más títulos. Y en el primer apartado se ha reavivado el fuego del mano a mano individual más espectacular, el Cristiano-Messi, después de que el argentino anotara el gol 773 de su carrera y se situara a 30 del segundo escalón histórico (el austríaco Josef Bican, con 803) y a 42 del portugués (815). 

La casualidad quiso que de nuevo fuese el Lille la víctima que propiciase un nuevo 'adelantamiento'. En febrero de este año, un gol ante el conjunto norteño sirvió a la 'Pulga' para superar la mítica cifra que dejó escrita Pelé: 767 dianas. Con los cinco tantos que le hizo a Estonia en el amistoso de Pamplona de junio igualó con Romario en el tercer peldaño histórico… y de nuevo un partido ante el Lille en el 1-7 de la segunda jornada sirvió para superar a otro mito brasileño y entrar en la gran pugna. 

Messi, con un fútbol maravilloso sin anotación el pasado fin de semana ante el Toulouse (0-3), ha repartido sus tantos entre el Barça (672, un 87 por ciento del total), la selección argentina (11) y el PSG (15, apenas un 2 por ciento). Aunque su ascendencia en el bagaje ofensivo de sus equipos es claramente superior al de sus 'competidores' en la carrera del gol, ya que acumula 332 asistencias frente a las 240 de Cristiano (en la época de Bican no se contabilizaban). 

En crisis

La situación es propicia para que Messi se acerque a la cima, ya que el luso vive tapado por la crisis deportiva del United... y la personal. Lleva inmerso en un vaivén de rumores desde que se ausentara de la pretemporada del equipo al alegar motivos personales, pero todo apunta a que buscaba un equipo que participara en la Champions. 

Cristiano no cuenta para Ten Hag, nuevo técnico de los 'red devils', a pesar del «claro que sigue entrando en mis planes» de la semana pasada. El neerlandés prefiere apostar por jóvenes valores: ha depositado su confianza en Rashford (24 años), Sancho (22) o Martial (26), ha dado minutos en ataque a Diallo (20) o Elanga (20), ha apostado 95 millones a Antony (22) e incluso espera a que se resuelva el caso de Greenwood (20), apartado del equipo a finales de enero tras ser acusado por su pareja de maltrato físico y psicológico. 

Los 37 años de Cristiano, su altísima ficha y su personalidad egocéntrica son tres elementos con los que el extécnico del Ajax no quiere lidiar: preferiría desprenderse del 'crack' para crear una piña, regenerar el equipo y someter al club a una completa revolución, la misión para la que fue contratado. 

El banquillo y el ostracismo son malos compañeros de viaje para el futbolista que disputará el próximo invierno su quinto Mundial. Necesita minutos y goles para evitar que Messi le recorte una distancia que parecía inabordable pero que se va recortando con cuentagotas, algo que agobia a Cristiano, teniendo en cuenta que su 'némesis' tiene dos años menos.