Este mes, comenzaron las estancias formativas del  Programa Cultiva 2021, por el que jóvenes agricultores y ganaderos hacen prácticas en explotaciones de toda España, como es el caso de la Bodega Andrés Morate de Belmonte de Tajo, en el sudeste de la Comunidad de Madrid.  

Esta empresa agrícola tiene 20 hectáreas de viñedo y 10 de olivar, todas ecológicas, y fue la elegida por Elena Yáñez, de Montealegre del Castillo, quien confesaba a los responsables del programa que es una recién llegada al mundo de la agricultura, en el que entró un poco a la fuerza.

«Me hice cargo de la explotación de mis padres hace poquito por circunstancias familiares -señala junto al propio Andrés, el dueño- y me he dado cuenta que es un trabajo que me permite tener tiempo libre y me gusta, he superado todos los estereotipos que yo misma tenía sobre la agricultura».

Entró en contacto con el Programa Cultiva por casualidad («me llegó por el correo») y se inscribió porque buscaba formas diferentes de gestionar una explotación. Por eso se fijó en el proyecto que tiene Andrés «de arriesgar un poco y apostar por la calidad y la posibilidad de hacer tu propio vino aunque no tengas una gran explotación». Las prácticas no solo incluyen el trabajo en la bodega y en la finca, sino también visitas a centros de investigación como el Imidra (Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario) que es el equivalente al Iriaf  de Castilla-La Mancha. 

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