La campaña de abonos 2022-2023 está abierta para la mayor parte de los clubes de Segunda División, lo que lleva implícitos los primeros datos de apoyo social a las diferentes entidades que competirán en la citada categoría. 

A tenor de las primeras cifras facilitadas por los clubes, comienza a observarse una brecha importante entre ellos en cuanto el número de aficionados que acudirán a los estadios de forma permanente durante toda la campaña, lo que no implica una traducción automática a la marcha de la competición, pero sí una ventaja que no puede despreciarse.

Aunque el comienzo de la campaña de abonos arrancó en fechas distintas (algunos ni siquiera lo han hecho), se percibe una diferencia considerable entre los equipos descendidos de Primera División y algunos históricos del fútbol español, y el resto de participantes que registra un menor apoyo social.

El Albacete, pese a sus vaivenes, ha arrancado con buenos datos, aunque no se antoja que pueda superar la mitad de la tabla de esta clasificación imaginaria de apoyo social.

Hay que recordar que en una liga profesional donde los criterios económicos son estrictos, el número de abonados también repercute en los ingresos de los clubes, lo que no conviene olvidar.

(Más información en la edición impresa y en la APP de La Tribuna de Albacete (htpps://latribunadealbacete.promecal.es)