Aquel milagro del Dépor

Diego Izco
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Veinte años después, el título de Liga del club gallego sigue siendo un misterio difícil de explicar

Aquel milagro del Dépor

Así como Grecia ganó la Eurocopa en 2004 y el Leicester la Premier League en 2016, este mes cumplimos en España 20 años de nuestro último gran ‘milagro’ futbolístico: la Liga del Deportivo de la Coruña. Fue la primera del nuevo siglo y todavía a día de hoy es difícil encontrar una explicación  deportiva o estadística al suceso, más allá de una conjunción de muchos factores… todos los que, actuando a la vez, podían hacer factible tal milagro. 

Por situar aquella 99-00 en contexto: ese Dépor, un proyecto muy personal y ambicioso del presidente Lendoiro, tuvo sus primeros escarceos con la élite de la mano del ‘viejo’ Arsenio Iglesias. Después de rozar el descenso en la 91-92, fue tercero, segundo y segundo las tres campañas sucesivas (nombres como los de Bebeto, Donato, Fran o Djukic resultan claves para comprender aquella esa época). La llegada de Irureta al banquillo, así como la de nuevos aires brasileños al césped desatan el torbellino perfecto en Riazor. Un once de leyenda con Songo'o, Manuel Pablo, Naybet, Schurrer, Romero, Donato, Mauro Silva, Víctor, Fran, Djalminha y Makaay. Un gran equipo, sin duda, pero ¿suficiente para tumbar a los gigantes? 

Rivales mediocres

Mientras el Deportivo caminaba hacia la última gran campanada de nuestra Liga, Real Madrid y Barça vivían una época de confusión. Todo fue extremadamente raro esa temporada: la Liga para los gallegos, la Copa para el Espanyol, la Supercopa para el Valencia, el ‘pichichi’? se lo llevaba un delantero del Racing de Santander (Salva) y el Atlético de Madrid, con un once que terminaba en el lujo de « Valerón, Kiko y Hasselbaink», descendía a Segunda División. 

En ‘Can Barça’, Louis Van Gaal toreaba con el clan de los holandeses: hasta ocho (Hesp, Reiziger, Bogarde, los hermanos De Boer, Cocu, Zenden y Kluivert) formaban parte del vestuario culé junto a Guardiola, Figo, Puyol o Rivaldo. A priori, una plantilla mucho más compensada que la del Deportivo, pero el conjunto culé decepcionó y terminó segundo la Liga con 12 derrotas a cinco puntos de los coruñeses. 

Peor fue el caso del Real Madrid (a pesar de que Del Bosque enderezó el rumbo en Europa hasta el punto de levantar la Champions): con la destitución de Toshack en la jornada 11, con el equipo 15º clasificado en la jornada 15, con un enorme once donde lucían Casillas, Roberto Carlos, Redondo, Guti, McManaman, Raúl, Morientes, Hierro, Seedorf.

El hecho de que los tres equipos más fuertes del campeonato (Barça, Valencia y Madrid) alcanzasen las semifinales de la Copa de Europa ayudó al ‘Superdépor’ de Irureta. 

Números increíbles

La dejadez de los dos grandes, sin duda, allanó el camino hacia el título. Sin embargo, los números tampoco explican un título liguero en la comparación de las Ligas del presente siglo: 

Puntuación

El Deportivo se adjudicó el título con 69 puntos, la cifra más baja de los últimos 20 años. El promedio obtenido por el campeón en el siglo XXI es de 88 (94 en la última década). Con un exiguo 60,5% de los puntos en juego (la media es del 71% en España) nadie ha sido campeón en ninguna Liga reciente. En el lado contrario, el de los mejores campeones, el Real Madrid de la 11/12 y el Barça de la 12/13 se fueron hasta los 100 puntos (87,7%).

Victorias

Esos 21 triunfos (seis empates y 11 derrotas) que logró el equipo de Irureta (un 55,3%) solo encuentran parangón con el Valencia de la 01-02, aunque los valencianistas sólo perdieron cinco duelos en toda la campaña. La media de partidos ganados por un campeón de Liga en este siglo es de 27 (30 en la última década).

Goles

Solo ese Valencia de la 01/02 (que apenas marcó 51 tantos) fue peor campeón que el Deportivo en esta estadística. Los de Irureta marcaron 66 goles, un promedio de apenas 1,74 por partido, el segundo peor registro del siglo. El promedio del ganador de Liga ha sido de 91 dianas (102 en la última década). En la estadística de goles encajados, el Dépor vuelve a ser el peor campeón del siglo en España: concedió 44 (1,16 por partido), cuando el promedio ha sido de 32 para ganar la Liga (el Barça apenas cedió 21 en la 10-11 y en la 14-15).

Con estos datos, sigue siendo difícil resolver el misterio más allá de recurrir al tópico más veraz que esconde este deporte: lo más bonito del fútbol es que, por muchos millones que entren en juego, por mucho que creamos saber de él, siempre será imprevisible. Increíble como aquel (merecidísimo) título de Liga.