«Las capacidades del Eurofighter siguen en desarrollo»

Josechu Guillamón
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«El Ala 14 tiene la obligación de mantenerse al día con las últimas actualizaciones que se van implementando»

Imagen del capitán Caballero en un Eurofighter del Ala 14. - Foto: Quique García

El capitán Caballero ingresó en la Academia General del Aire en 2004. Recibió el Real Despacho de Teniente en julio de 2009, siendo destinado al Ala 14, donde ha alcanzado las 300 horas de vuelo con el Mirage F-1 y ha superado las 1.000 con el Eurofighter. 

¿Por qué decidió convertirse en piloto?

Tenía vocación militar por mi padre, que era oficial de Infantería del Ejército de Tierra. Pero la elección de pedir el Ejército del Aire la tomé durante el segundo año de preparar la oposición para el ingreso en las Fuerzas Armadas. Siempre he tenido gran inquietud por llevar cualquier tipo de máquina, ya fuera coche, moto, barco o avión, por lo que vi en ser piloto, la manera de cumplir mis dos sueños, manejar un sistema tan complejo como lo es un avión de caza, y al mismo tiempo ser militar y poder servir a España.

Usted vivió el cambio del Mirage F1 al Eurofighter, ¿qué supuso el cambio?, ¿los cielos españoles están más seguros con el Eurofighter?

La diferencia entre dos modelos de avión, cuyos diseños distan unos 30 años, es comparable al desarrollo en la informática. Por lo que uno se puede hacer una idea de la grandísima diferencia que hay entre los dos aviones. En los aviones modernos la dificultad radica no tanto en el pilotaje, debido a las ayudas que el propio avión ofrece al piloto, sino en la gestión del sistema de armas tan complejo que lleva integrada la máquina. Sobra decir que, con sistemas como el Eurofighter la eficiencia, la efectividad y la seguridad que se alcanza en mucho mayor.

Entre las misiones en las que ha tomado parte una de ellas es la de Policía Aérea del Báltico, ¿qué fue lo más complicado de la misma?, ¿cómo afectaron las bajas temperaturas?

En el Báltico, las bajas temperaturas (-27º C) fueron un reto no solo para los aviones sino para todo el personal (mecánicos, armeros, bomberos, electrónicos…) que trabajaban duramente en tierra para que nuestros aviones pudieran cumplir su misión. Tras un proceso de adaptación durante los primeros días, digamos que toda la ‘maquinaria’ rodaba perfectamente engrasada. Otro punto importante fue el hecho de tener un estado meteorológico tan cambiante, debido a que el país, Lituania, es completamente llano, y lo que en el despegue era un día completamente despejado y de sol, hora y media después, durante el aterrizaje, se podía encontrar uno con una buena tormenta de nieve, sin apenas visibilidad.

Una de sus principales misiones era la de evitar que se produjeran invasiones del espacio aéreo de Letonia Estonia y Lituania, ¿cómo fue su experiencia?

Al no tener una fuerza aérea capaz de asegurar la soberanía de su espacio aéreo, esos países recurren a sus aliados de la OTAN para que hagan de policía aérea, dejando ver a sus países vecinos, que deben respetar sus fronteras. Para todos los que hemos participado como la Policía Aérea del Báltico, este tipo de misión ha supuesto un punto de inflexión en cuanto a la confianza en el avión y en nosotros mismos, debido a que prácticamente el total de los vuelos que allí se efectuaban eran misiones reales.

¿Cuál es la importancia de su trabajo diario?

La misión principal del Ejército del Aire es asegurar la soberanía del espacio aéreo español 24 horas al día, los 365 días del año. Nuestro trabajo diario está enfocado a que el personal, tanto de tierra como pilotos, esté entrenado al más alto nivel. Eso requiere de un esfuerzo laboral, personal y, muchas veces, familiar para conseguir alcanzar ese importante reto.

¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta el Ala 14 en el futuro?

Los desafíos que tiene el Ala 14 en el futuro, no dejan de ser los mismos que ha tenido hasta la fecha, que son el seguir cumpliendo con la protección del espacio aéreo, manteniendo al mismo tiempo el resto de compromisos nacionales e internacionales. Entre éstos se incluyen ejercicios de gran entidad, como el Red Flag en EEUU, o misiones reales como la Policía Aérea del Báltico. A su vez, hay que decir que las capacidades del Eurofighter siguen en continuo desarrollo y mejora, por lo que el Ala 14 tiene la obligación de mantenerse al día con las últimas actualizaciones que se van implementando.