Este sábado, 28 de enero, tuvo lugar la tercera de las pruebas de la décima edición de las Rutas de Senderismo de la Diputación Provincial de Albacete. Los senderistas recorrieron la Ruta de El Chaparral, de dificultad técnica media, un recorrido circular de 17 kilómetros y unas cinco horas de duración.

Tras el café comenzó la ruta sobre las nueve de la mañana. Pasaron en primer lugar, por el antiguo lavadero municipal, que se encuentra muy bien conservado, aquí enlazaron con la vía pecuaria o cañada real de Los Serrano, que comunicaba Cuenca con la zona de levante, Cartagena, donde se hacia la trashumancia. 

Entre campos de cultivo, manchados por alguna encina y algún pinar, avanzaron hasta llegar a una zona donde se podía apreciar dos espacios bien diferenciados. Por un lado, se veía una extensa zona cerealista llana y por el otro La Ceja del Chaparral, donde se conserva el terreno como era originariamente, mediterráneo autóctono, compuesto por plantas aromáticas, jaras, matorrales, coscojas y como no encinas.

Entre una gran espesura vegetal, llegaron hasta un árbol singular, una gran encina de cinco pies, la Carrasca del Rincón del Edén. Con sus largas ramas, formaba una especie de gran carpa, donde apenas entraba un rayo de luz.

Salieron de este bosque para atravesar un pinar y adentrarse en una zona con vegetación típica de humedales; una zona llana con juncos con bellos tonos en esta época del año, chopos, carrizos y unos viejos álamos de gran envergadura. 

Así llegaron al pantano de la casa Aparicio, donde se ubicaba una gran balsa de riego, que se llenaba con el agua que recogía una rambla cercana, a día de hoy en desuso. Justo a sus pies, en una gran planicie soleada, donde aprovecharon para tomar un tentempié.

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