McKinley James actúa en el Auditorio Municipal de Albacete

Redacción
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El músico, en formato trío, presentará su último EP, 'Still Standig By', producido por Dan Auerbach, de The Black Keys, en su estudio de Nashville, con base de guitarra soul y blues

McKinley James (centro), actúa con su banda en el Auditorio Municipal.

El Auditorio Municipal de Albacete acogerá el martes, a partir de las 21,30 horas, un concierto de McKinley James. 

Lo primero que se  advierte del nuevo y extraordinario EP Still Standing By, de McKinley James, es una base de guitarra de soul y blues característico de la famosa  Motown.

No suena como el tipo de blues habitualmente tradicional del género, suena a un guitarrista que entiende la teoría de los acordes tan bien, que a veces  jurarías escuchar una sección de viento.

McKinley James  entraba en las tiendas de guitarras, se enchufaba y «convocaba los espíritus» de sus propios ídolos, pioneros casi olvidados como Otis Rush y Johnny Guitar Watson. Still Stand By es su tercer EP, todos ellos tocados bien y elegantemente, y aquí está la cosa,  McKinley tiene 19 años y es ya todo  un veterano.

Still Standing By es un festival de seis canciones. El EP fue producido por Dan Auerbach, de The Black Keys, en sus estudios Easy Eye Sound en Nashville, es música soul con una pizca de gruñido blues, todo escrito por el propio McKinley, con Patrick Sweany en Whatever It Takes (For Love) y Stuck in the Shadows establece el tono del disco. 

Nacido y criado en Webster, Nueva York, cerca de Rochester, McKinley James se mudó a Nashville con su familia cuando apenas tenía cinco años. Siempre han sido un grupo musical, su padre Jason Smay es parte de su banda, ha sido  batería de Los Straitjacket y J.D. McPherson. Con Austin John Doody a los mandos del Hammond, se cierra el trío.

Cuando era niño, James se quedó prendado del órgano Hammond que había en su casa y aprendió a tocarlo, es un ejemplo vivo de por qué todo guitarrista debería empezar con el teclado; aprendió mucho sobre teoría y el manejo del instrumento, y cuando finalmente se decantó por la guitarra superaba con creces a cualquier guitarrista.

Pronto la banda se lanzó a la carretera, tocando en Family Wash and Basement habitualmente y sólo los detuvo la pandemia y el confinamiento de 2020.  Su viaje musical incomparable lo ha llevado a todos los escenarios de América y Europa, incluso al Bridgestone Arena de Nashville con todas las entradas agotadas y donde interpretó la canción principal del álbum con Eric Church para una multitud local.

Se perdió la graduación en la escuela secundaria por un concierto  y ahora que  todo está volviendo a la normalidad después de la pandemia, Mc Kinley James  y su banda se están de nuevo en la carretera, en su gira nacional que pasará el martes por el Auditorio Municipal de Albacete, a partir de las 21,30 horas.