"No estábamos preparados para un hospital lleno de agudos"

T.R
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Según el especialista en Neumología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, el doctor Raúl Godoy, que se contagió de Covid-19, a su regreso tras las baja laboral se encontró un centro distinto y con "una situación emocional caótica"

El doctor Raúl Godoy, especialista en Neumología del CHUA. - Foto: R.G.

Raúl Godoy, especialista en Neumología del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete y presidente de la Socampar (Sociedad Castellano-Manchega de Patología Respiratoria) ha vivido la pandemia del coronarivus desde el lado de paciente que ha sufrido la enfermedad y desde el de médico que se enfrenta a una situación que calificó de «pesadilla» y «ciencia ficción».

     El doctor Godoy cayó enfermó el 14 de marzo justo cuando ya empezaban a llegar al Hospital los primeros casos graves de Covid-19 y empezaban a ser aislados los enfermos. Unos días antes, el 9 de marzo, este neumólogo y otros compañeros ante la histeria general que empezaba a despertarse en la población por el coronavirus comentó el hecho de que los pacientes estaban demasiado juntos en la sala de espera de consultas externas y que lo razonable sería suspenderías, así como proteger a pacientes y profesionales de las consultas mientras eso sucedía. En paralelo relata que ya el 11 de marzo comenzó a subir la presión asistencial derivada de la demanda de casos por coronavirus. Aunque no lo puede saber a ciencia cierta pero su sospecha le hace pensar que en la última guardia que tuvo, donde estuvo muy expuesto, se contagió. «Sabedores de que podía ocurrir, porque en esa guardia caímos bastantes profesionales, y sin medidas adecuadas de protección, no podíamos dejar de atender a nuestros pacientes».

Fue el 14 de febrero cuando el doctor Raúl Godoy empezó a sentir los primeros síntomas del virus, como fiebre alta, pero desapareció un día después, lo que le hizo consultar con su jefe que una vez le hicieran la PCR en su domicilio podría incorporarse a trabajar, pensando que lo suyo había sido una gripe más banal. Casi una semana pasada sufrió una recaída importante que le dejó postrado en la cama, de nuevo con fiebre, y sin fuerzas para levantarse, y aislado del resto de su familia, para evitar nuevos contagios en su seno. Reconoce que lo ha pasado mal, pero que afortunadamente no ha llegado a tener disnea respiratoria.

     A su regreso a la actividad laboral, el doctor Godoy reconoce que se ha encontrado un hospital diferente, dedicado casi en exclusiva a la atención de pacientes con Covid-19, y donde existe una situación emocional «caótica» porque la gente «está hundida» después de largas y duras jornadas de trabajo para luchar contra esta pandemia. En su opinión, «no estábamos preparados para tener todo un hospital lleno de pacientes con patología aguda».

     Aunque muestra su malestar porque los médicos a pie de calle «no hemos tenido toda la información, con instrucciones y medidas contradictorias, y con unos políticos que no han tomado nota de forma adecuada, de la que se avecinaba», destaca la buena organización y la respuesta de los profesionales conformando equipos de trabajo donde se han dejado al margen todas las especialidades y todos han arrimado el hombro.

Le preocupa eso sí sus pacientes con patologías neumológicas y su seguimiento en estos momentos. Por eso, el doctor Godoy apuesta por una vez acabe la lucha frente a este virus se fomente la realización de unidades de cuidados intermedios y el empleo de la telemedicina como una herramienta de futuro, con la creación de una plataforma fácil y accesible.