Marisa Cabezuelos Morales es limpiadora del Hospital de Hellín desde el 14 de mayo de 1990. Por eso cuando se empezó a hablar de la crisis del coronavirus no le dio mucha importancia, después de haber vivido la de la gripe A y la del ébola «que crearon mucha alarma y al final se quedaron en nada».
Sin embargo, todo cambio cuando llegaron los primeros casos. «El fin de semana del 8 de marzo empezó la cosa a ir mal y el siguiente fin de semana fue una locura, porque se tuvo que hacer todo sobre la marcha, nos pilló a todos desprevenidos. La empresa no estuvo muy a la altura de las circunstancias, aunque entiendo que no lo estuvo nadie».
Y es que la situación que les ha tocado vivir no ha sido fácil. «Al principio hubo cuatro compañeras de baja, hubo gente que no lo soportó porque fue muy duro y hubo quien tuvo que coger baja por depresión».
El problema es que no sólo ha habido compañeras que han dado positivo al Covid 19, sino que ellas han visto la muerte de cerca y no sólo la de los pacientes. «Trabajamos con muchísima incertidumbre, con muchísimo miedo, porque todos los días vienes con los dedos cruzados, porque todas las limpiadoras tenemos nuestras familias, nuestros padres, nuestros sobrinos, nuestros hijos, nuestra gente con problemicas, de hecho el suegro de una de nuestras compañeras que trabajaba en el hospital murió de coronavirus, con 50 y pocos años, se le complicó con un infarto».
Un miedo al contagio que siempre está presente. «Vivimos con mucho miedo y todos los días sin saber si lo has cogido o no, porque tienes tos y ya no sabes si es paranoia tuya o un síntoma. Ahora están empezando a llegar test, pero aunque nosotras también estamos en primera línea de batalla, entiendo que primero estén los sanitarios, aunque nosotras también sufrimos riesgos».
En cualquier caso, asegura que esa situación difícil sacó lo mejor de todos. «Por parte del personal sanitario y de mis propios compañeros ha habido mucho compañerismo, eso es lo que ha salido estos días. Todo esto está funcionando por el trabajo ingente que hemos hecho todos».
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