Albacete tiene un déficit aproximado de un millar de docentes. Una carencia que se verá acentuada en la próxima década a tenor del envejecimiento de las plantillas. Un tercio del profesorado, aproximadamente unos 2.000 en la provincia, tienen más de 50 años, por lo que se irán jubilando en los próximos 10 años, lo que requerirá amplias ofertas de empleo para asegurar el relevo generacional.

«Hay que potenciar la actividad docente como una alternativa laboral atractiva y de prestigio para nuestros jóvenes». Es la afirmación del sindicato Anpe en el Día Mundial de los Docentes que se celebró ayer. El presidente provincial, Martín Navarro, considera que es necesario que desde la Consejería de Educación de Castilla-La Mancha se aborden desde ya «amplias ofertas de empleo público», no solo para garantizar el relevo generacional, sino para ir solucionando todas las carencias que tiene la educación en esta comunidad autónoma y que, a pesar de estar sobre la mesa, quedaron paralizadas por la pandemia.

Se da la circunstancia que el Covid trajo hasta las aulas de esta provincia el refuerzo de docentes tan reivindicado desde hace años por el tejido sindical educativo para ofrecer una educación de calidad. Quizá no todo el que consideraron necesario en su momento, pero al menos solucionó algunos de los problemas que generó el coronavirus en algunas clases. Lo que no está muy claro es si este refuerzo que se ha repetido para el curso 2021-2022 ha llegado para quedarse. «Parece que esta decisión, que no ha sido suficiente, solo se ha llevado a cabo en el ámbito asistencial, pero la Junta no puede olvidarse del aspecto educativo», significa Navarro.

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