Si se enfrentan el tercer clasificado con el sexto, con dos localidades cercanas y si encima el partido tiene un horario decente, todo fluye para que el Ciudad de Valencia vaya a ser tomado este domingo por los aficionados del Albacete Balompié.

La excelente marcha del equipo de Rubén Albés, la rivalidad histórica existente entre ambos clubes y la cercanía de Albacete y Valencia son todos los condicionantes para que casi 13 años después de la última visita en liga, en mayo de 2010, miles de albacetenses poblen las gradas del Estadio granota.

El club vendió en unas horas las entradas facilitadas por el Levante, también ocurrió parecido con las que a través de los convenios existentes se pusieron a la venta por parte de la Federación de Peñas. Normal dado que la Grada Visitante del Ciudad de Valencia apenas tiene 400 localidades. Muchos son los que han comprado entradas online en otras partes del campo, sin olvidar los cientos de albacetenses que por motivos de estudios o trabajos viven por la zona.

La Federación de Peñas botará ocho autobuses, no da para más, pero la demanda se ha desbordado. Se espera que entre tres y cuatro mil albacetenses cubran de blanco un estadio con capacidad para 26.000 espectadores y un rival, el Levante, que tiene algo más de 14.000 espectadores.

La locura se ha desatado en un Albacete cuyos aficionados ya no solo piensan en el playoff, sino que apuntan todavía más alto. El ascenso directo está a tiro de seis y el Levante, tercero, tiene 54 puntos por lo que un triunfo manchego lo acercaría a los de Albés a soñar a lo grande.