Los 550.195 boletos que Cáritas Diocesana de Albacete puso a la venta en su tradicional Tómbola del Paseo de la Feria se agotaron incluso antes del cierre de la Feria, el sábado entre las 17,30 y las 18 horas se vendieron las últimas papeletas dejando al último turno de voluntarios sinla opción de vender más.

Esta venta se ha traducido en una recaudación de alrededor de 440.000 euros, con un beneficio neto para la entidad superior a los 165.000 euros, es decir, el 37,5% del total de lo obtenido, ya que del montante global Cáritas ha tenido que abonar los salarios de los 17 trabajadores contratados y otros gastos derivados del montaje y adquisición de productos.

Estos buenos resultados han sido fruto, en opinión del secretario general de Cáritas, Antonio García Blanquer, de dos factores: que la Feria de Albacete abarcarse dos fines de semana, como ha ocurrido en esta ocasión, y que la meteorología, es decir, las lluvias, no hicieran acto de presencia o fueran poco relevantes, como así fue. También por el buen hacer y el trabajo intenso de las personas que han trabajado en la Tómbola y de los más de 300 voluntarios, a los que agradeció su esfuerzo, así como el de las 135 empresas colaboradoras.

«Montar la Tómbola siempre es un reto organizativo, y este año se ha notado que había ganas de Feria y de Tómbola», señaló García Blanquer, que agradeció «la tremenda respuesta de la sociedad en general y de la albacetense en particular, que de nuevo se ha solidarizado con Cáritas».

La recaudación obtenida de la Tómbola de Cáritas, que es la principal fuente de financiación con recursos propios de la institución, se destinará a sufragar el coste de los servicios y actividades que Cáritas presta a los colectivos en riesgo de exclusión social.

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